La Comisión de la Verdad fue condecorada este jueves por el Congreso por su labor en la dignificación de las víctimas por el conflicto armado, en una ceremonia en la que quien fue su presidente, el padre Francisco de Roux, pidió valentía para implementar las recomendaciones que dejaron en el informe final presentado hace un año.

Colombia “tiene pánico al cambio”, y eso se debe a que “no sabemos lo que es tener un país en paz”, sin corrupción, sin narcotráfico, sin impunidad y equitativo, alegó el padre de Roux durante el acto en la plenaria del Senado.

Desde ahí, el jesuita agradeció al Senado “este gesto tan hondo y tan profundo”, aunque criticó al Gobierno por no incluir las nueve recomendaciones propuestas por la Comisión en el Plan Nacional de Desarrollo (PNS) aprobado el pasado mayo.

“Queríamos que el espíritu de estas recomendaciones orientaran las discusiones del Congreso pero esto no fue aceptado”, aclaró de Roux, que piensa que sin estas medidas “no vamos a parar con la destrucción de la vida humana”.

El informe final presentado por la Comisión de la Verdad el 29 de junio del pasado año consta de diez capítulos, que incluye el de hallazgos y recomendaciones y uno testimonial, que son fruto de más de cinco años de trabajo de esta institución creada por el acuerdo de paz con las FARC para tratar de establecer las principales heridas creadas por el conflicto colombiano y ofrecer soluciones de no repetición.

Este documento consta de una ingente cantidad de datos y hechos cometidos, pero también incluye patrones criminales de varios grupos armados y de las fuerzas del Estado y tomos inéditos entre las comisiones de la verdad como el capítulo dedicado al exilio.

ACABAR CON EL “HOLOCAUSTO”

La ceremonia, presidida por la senadora del Pacto Histórico, Clara López, condecoró con la Orden del Congreso al padre de Roux y a tres comisionados que estaban presentes: Martha Ruiz, Lucía González y Leyner Palacios.

López reconoció la labor de los equipos de la Comisión de la Verdad que “recorrieron las ciudades” para encontrarse con “millones de víctimas de crímenes que jamás debimos permitir”.

Y lamentó la situación en la que se encuentra Colombia en términos de violencia, señalando que el país está lejos de acabar con el “holocausto” que les sigue acompañando por el conflicto armado y la corrupción.

Para acabar con este problema, la senadora señaló “la importancia de la justicia” como elemento clave para combatir la impunidad, además de optimizar “las metodologías de investigación” para abordar todos los fenómenos criminales que siguen existiendo en Colombia.

“Hay que destacar el legado de la Comisión para que sea reconocida como fuente de cambio social y no se repita lo que sucedió en el pasado”, indicó López.

El padre de Roux también destacó durante su intervención el sufrimiento de las más de nueve millones de víctimas afectadas por el conflicto armado durante más de medio siglo.

“Las cifras nos confunden y no permiten ver la magnitud (…) pero nosotros nos hemos acercado a cada familia y hemos visto su sufrimiento”, explicó el jesuita, que también lamentó que los colombianos vieron “pasar todo esto como si no fuera con ellos”. EFE