El Comité de Seguimiento y Monitoreo (CSM) del “Informe Final” de la Comisión de la Verdad presentó su primera valoración en el primer aniversario de su publicación. El documento destaca la falta de prioridad que el Congreso colombiano ha dado a la implementación legislativa de sus recomendaciones, pero también reconoce avances.
Era 28 de junio de 2022, Gustavo Petro acababa de ganar las elecciones presidenciales de Colombia, cuando en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán, ante 1.600 personas, se presentaba el informe de la Comisión de la Verdad, surgida del Acuerdo de Paz de 2016 entre el Estado y la entonces guerrilla de las FARC.
Petro ese día cogió el micrófono e hizo referencia a los “200 años de soledad” que, en su opinión, lleva sumida Colombia. También dijo que en su Gobierno se haría pedagogía sobre los “Hallazgos y Recomendaciones” del informe y, pese a no ser de obligado cumplimiento, aseguraba que este sería implementado.
La vida del documento no terminó ese día y, como estaba dispuesto en el Acuerdo de Paz, se formó un Comité de Seguimiento y Monitoreo (CSM) para un periodo de 7 años. Integrado por 7 personas, se reúne de forma regular y tiene por objetivo incidir en instituciones para la implementación de las recomendaciones, además de emitir informes semestrales sobre los avances institucionales.
Este miércoles 26 de julio, en el Centro de Memoria, Paz y Reconciliación de Bogotá se ha celebrado el evento de presentación del primer documento de valoración. “Las recomendaciones de la Comisión de la Verdad son un patrimonio público de las víctimas de toda la sociedad”, manifestó Wilson Castañeda, miembro del comité, al presentar el informe.