Claudia López propone presupuesto 2024 de $33,2 billones para que lo ejecute el nuevo alcalde Carlos Fernando Galán
–La alcaldesa saliente Claudia López anunció que radicó ante el Concejo un proyecto de presupuesto para el próximo 2024 aforado en 33,2 billones de pesos, de ellos 26,36 billones para inversión y 4,65 billone de pesos para gastos de funcionamiento, esto es, para la burocracia, recursos que deberá administrar y ejecutar el nuevo alcalde Carlos Fernando Galán.
Otro rublo importante dentro de la iniciativa es el pago de la deuda que asiende a 2,16 billones.
Según la mandataria, “con este presupuesto se busca seguir en la labor de hacer de Bogotá una ciudad más cuidadora, incluyente y sostenible, priorizando la atención con el apoyo a la población pobre y vulnerable, así como la financiación de inversiones estratégicas para la ciudad”.
Radicamos ante el Concejo de Bogotá el presupuesto 2024 por $33,2 billones, de los cuales 26,36 billones son de inversión. Más de la mitad de los recursos serán destinados a la política social: educación, salud, integración social y hábitat. Y un 28% se destina a la movilidad.… https://t.co/05w67Ly5xc
— Claudia López Hernández (@ClaudiaLopez) November 3, 2023
Además, la alcaldesa hizo un balance de las ejecuciones presupuestales de su gobierno:
En estos cuatro años, la Administración distrital ha invertido los recursos en grandes proyectos, unos terminados y otros en ejecución, que, sin duda, harán de Bogotá una ciudad más incluyente y productiva.
Uno de los proyectos más importantes es el de la Primera Línea del Metro, cuyo avance es del 25% e iniciará operación en 2028. Este proyecto, que estuvo estancado por más de 70 años, espera darle un gran impulso a la movilidad de la ciudad y beneficiar a 3 millones de habitantes.
En ese mismo sentido, y durante tres años, se ha trabajado en la estructuración de la segunda línea del metro, que será subterránea, llegará a Suba y Engativá y beneficiará a 2,5 millones de personas.
En octubre de 2023 se logró abrir la licitación pública internacional para seleccionar al concesionario que ejecutará esta línea y que se encargará de realizar los diseños, construir las obras y los montajes electromecánicos, proveer los trenes, financiar, operar y mantener su funcionamiento.
Así mismo, se están llevando a cabo trabajos en las avenidas 68 y ciudad de Cali, que serán alimentadoras del metro y que cerrarán el 2023 con un avance del 53% y 61%, respectivamente.
Por su parte, el cable aéreo de San Cristóbal, que contará con una inversión de 457 mil millones de pesos e iniciará su construcción a finales de 2023, y el de Potosí, que se dejará contratado, beneficiarán a los habitantes del sur de la ciudad. Otros proyectos importantes para la movilidad que quedan en ejecución son el Regiotram Occidente, la Alo Sur, la calle 13 y la intersección de la 80, que iniciará construcción en 2024, entre otros.
De igual forma y reconociendo la importancia del transporte multimodal, se entregarán 231 kilómetros nuevos de ciclorrutas, para dejar un total de 790 kilómetros que podrán disfrutar los ciudadanos que se desplazan por la ciudad en bicicleta.
En materia de mejoramiento de la infraestructura educativa, la actual Administración viene trabajando en 70 nuevas instituciones, 35 de ellas terminadas, 25 en obra y otras 10 en fase de estudios y diseños. Igualmente, lanzó la Ruta 100k, que beneficia a más de 134.000 estudiantes, con dispositivos electrónicos, conexión a internet y acompañamiento pedagógico, para cerrar la brecha digital entre estudiantes de colegios públicos urbanos y rurales de Bogotá.
A su vez, 87.000 jóvenes se han beneficiado con el Programa de Doble Titulación del SENA y se han entregado 40.000 becas para acceso a educación superior, técnica y tecnológica, en el marco del programa Jóvenes a la U. En estos cuatro años, el compromiso con los jóvenes de la ciudad trascendió a oportunidades de empleo y superación de condiciones de vulnerabilidad, por ello, durante esta administración, más de 100.000 jóvenes encontraron trabajo por medio de proyectos de obra pública, construcción y mejoramiento de vivienda, entre otros programas.
Con el programa Parceros, se otorgaron transferencias monetarias a 28.000 jóvenes que se encontraban en situación de alta vulnerabilidad social. Con la estrategia de Ingreso Mínimo Garantizado, el Distrito invirtió 2 billones de pesos que han beneficiado a más de 1,3 millones de hogares pobres y vulnerables y a cerca de tres millones y medio de personas, en gran medida, afectadas por la pandemia.
El efecto de las transferencias explica el 39% de la reducción de la pobreza monetaria y el 82% de la reducción de la pobreza monetaria extrema entre 2020 y 2022.
Durante el cuatrienio, se inauguraron 21 Manzanas del Cuidado y dos unidades móviles en donde se atendieron más de 451.000 personas (cuidadoras y sus familias).
De igual forma, a través de la Línea Púrpura, se atendieron más de 64.000 mujeres víctimas de la violencia; y 3.000 mujeres, junto con sus acompañantes, fueron acogidas en seis Casas de Refugio.
En materia de salud, se atendieron en casa 1,4 millones de personas y se dispensaron más de 500.000 medicamentos, bajo los programas Salud a mi Barrio y Salud a mi Vereda. Para el cierre del 2023, se habrán entregado cinco nuevos hospitales y quedarán otros tres en construcción; igualmente, a nivel de centros de salud, serán entregados 13, otros cuatro quedarán en obra y tres en estudios y diseños.
En cuanto a vivienda, al finalizar el presente año, más de 68.000 familias se habrán beneficiado con subsidios de vivienda para arrendamiento, mejoramiento o adquisición.
También se destaca la creación del Plan Terrazas y del Plan de Barrios Vitales, orientados a mejorar sus entornos y construcciones de manera segura.
En seguridad, aunque sin duda es necesario hacer mucho más, el Distrito invirtió 1,1 billones de pesos, la mitad de estos recursos destinados a la Policía.
Dentro de estas inversiones, sobresale la entrega del nuevo Comando de la Policía Metropolitana, así como la adquisición de motos, carros, drones, radios y otros elementos que facilitan su labor.
La otra mitad se destinó a convivencia y justicia, con dos nuevos centros de detención, seis Casas Refugio, 16 Casas de Justicia y cinco URI, con estrategia de atención para la protección de las mujeres víctimas de violencia.