Petro atribuye a la corrupción, la politiquería y la exclusión, tragedia en la carretera a Quibdó
–En un extenso trino en su cuenta en la red social X, el presidente Gustavo Petro, se pronunció este domingo en torno a las causas del deslizamiento que se registró en la carretera a Quibdó el pasado 12 de enero, que dejó 39 personas muertas, 4 desaparecidas y una veintena de heridos.
“Nunca contrataron la construcción de la carretera a Quibdó con el tratamiento de taludes, cuando es una de las zonas más lluviosas del mundo”, comienza diciendo el jefe del Estado, quien atribuye la tragedia al “negocio, la financiación de la política con dineros públicos, la corrupción y la exclusión”.
Petro hace, además, las siguientes precisiones:
Los presupuestos para hacer la carretera eran por tanto de los menores por kilómetro, nunca parecido a las 4G. Ralentizaron los tiempos de construcción a través del mecanismo financiero llamado “vigencias futuras”. Así la carretera a Quibdó, como otras, lleva más de 20 años de construcción
Las llamadas “vigencias futuras” es un mecanismo de compromiso de la nación hacia el futuro que puede extenderse por décadas, permiten a los presidentes anunciar obras por montón, pero luego comités de funcionarios, determinan que obra se hace rápido y cual no, las que no, pueden durar décadas, donde cada año se hace un kilómetro o dos.
Las de construcción rápida van a la ANI, las que se ralentizan al Invias. Las de la ANI son concesiones privadas, las del invias obra pública. Los contratos de obra son diferentes. La decisión sobre si se construye rápido y con abultados recursos o lentamente y sin recursos depende de la política, de lo jugoso del contrato. Tambien depende del racismo, de la mirada excluyente de la oligarquía sobre el territorio olvidado.
El periodismo no entra a hacer el éxamen. Los comités estan llenos de tecnócratas a los que se les cree a pie juntillas, no descubren que detrás está el negocio, la financiación de la política con dineros públicos, la corrupción y la exclusión
Así se armó un castillo de naipes, una pirámide financiera con los peajes y las 4G. Así valorizaron tierras de ricos, con el dinero público, sin cobrar la valorización; así se desvalorizaron las tierras y los territorios de los pobres
El territorio excluido por tanto, siguió siendo más excluido. Las grandes inversiones se concentraron en los alrededores de Medellín, de Bogotá y sus salidas más cortas al mar. Ampliar la autonorte, dijeron, no importa el humedal, se burlaron de soterrar la autosur, porque pasa por Soacha.
A tal extremo llegaron, que ninguna 4G nos conecta con nuestra propia región continental: Suramérica.
Suramerica es para los pobres y se vuelve comunista, dijeron. Suramérica es mejor bloquearla.
Lo hizo un gobierno con Venezuela y una falla geológica con Ecuador.
Fue jugosa la ampliación del contrato Ocaña/Gamarra pero no se les ocurrió que el Catatumbo se conectara cuando era lo que seguía.
Ahora lloramos los muertos del Chocó sin analizar el porqué de sus muertos que no es más que el racismo y el abandono de los territorios de los pobres.
Es esto lo que tenemos que cambiar para que tengamos Paz.