Iglesia Católica colombiana realizó rogativa nacional para que llueva y se extingan incendios forestales
–Preocupados por la crítica situación en Colombia debida a la escasez de agua y los múltiples incendios forestales que se han presentado en los últimos días en diferentes regiones, los obispos del país efectuaron una rogativa nacional este domingo “para pedir a Dios el don de la lluvia”. Asimismo, enviaron una carta al Pueblo de Dios, en la que evidenciaron “la necesidad de tener mayor conciencia medioambiental, así como de emprender acciones contundentes que ayuden a prevenir este tipo de riesgos”.
En el mensaje, los prelados aludieron a la actual situación climática, acentuada por el fenómeno de “El Niño”, y enfatizan el imperativo de “dirigir la mirada al Dios de la vida pidiendo que mueva nuestros corazones para que emprendamos acciones concretas de ‘conversión ecológica’, animados por el cuidado y conservación que debemos tener de nuestra casa común y de los más pobres, que son los principales afectados”.
A través de un videomensaje, el Cardenal Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, recordó que esta situación también es consecuencia del uso indebido de los recursos y de la falta de prevención. “Hoy estamos sufriendo también por las quemas, por las talas, por la contaminación”, expresó el purpurado.
Este fue el llamado que previamente hizo el cardenal colombiano para la rogativa nacional:
El jueves pasado 25 de enero, el presidente Gustavo Petro decretó el estado de emergencia. A su vez, el Ministerio de Ambiente puso en marcha el Plan Estratégico de la Amazonía para prevenir los efectos de la sequía. Según agencias, se prevé un posible estrés hídrico en hasta 162 municipios, para los cuales se planteaba el despliegue de 1,100 carrotanques para abordar problemas de desabastecimiento de agua.
Esta información la destacó el sistema de información del Vaticano, Vatican News.
Y en efecto, en todas las celebraciones liturgicas que se realizaron la víspera en las iglesias del territorio colombiano, los sacerdotes oficiantes pronunciaron una oración pidiendo al Todo Poderoso enviar la lluvia a Colombia, a fin de superar la grave sequía y extinguir los incendios forestales que han arrasado grandes extensiones de vegetación y amenazado la vida de humanos y animales silvestres.