Israel ante la Corte Internacional de Justicia: “Es una guerra trágica, no un genocidio”
–Israel defendió la necesidad militar de su ofensiva en Gaza ante la Corte Internacional de Justicia, después de que Sudáfrica solicitara al tribunal que le ordene detener las operaciones en Rafah.
El caso de “genocidio” promovido contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia, en el que Sudáfrica pide al alto tribunal de la ONU ordenar un alto el fuego en Gaza, “está totalmente desconectado de los hechos”, declaró Israel este viernes ante los jueces.
“Por cuarta vez, Sudáfrica presenta al tribunal una imagen que está totalmente desconectada de los hechos y las circunstancias”, declaró ante la CIJ en La Haya el abogado Gilad Noam, que representa al Estado de Israel. “(El caso) supone una burla de la atroz acusación de genocidio”, dijo Noam.
Antes de la presentación de Israel, varias docenas de manifestantes de manifestantes proisraelíes mostraron fotografías de rehenes tomados por combatientes de Hamás el 7 de octubre y exigiendo su liberación.
Ayer jueves, la embajadora de Sudáfrica en Holanda, Vusimuzi Madonsela, solicitó al tribunal que ordenara a Israel que “retire inmediata, total e incondicionalmente al Ejército israelí de la totalidad de la Franja de Gaza”. El equipo jurídico sudafricano enmarcó la operación militar israelí israelí como parte de un plan genocida destinado a provocar la la destrucción del pueblo palestino.
En sentencias anteriores, el tribunal ha rechazado las demandas de Israel de desestimar el caso y le ordenó que impidiera los actos de “genocidio” contra los palestinos.
Ayer, Sudáfrica instó a la Corte Internacional de Justica (CIJ) a ordenar a Israel que detenga inmediatamente la embestida militar contra Rafah, la ciudad del sur de la Franja de Gaza donde llegó a refugiarse más de un millón de palestinos desplazados por los ataques israelíes.
La audiencia fue solicitada por Sudáfrica el 10 de mayo pasado con el objetivo de pedir a ese tribunal que emita medidas provisionales de emergencia luego de la intensificación de los bombardeos israelíes a Rafah, los anuncios de una operación militar terrestre, las órdenes de evacuación a la población y las declaraciones de altos funcionarios que apuntan a la aniquilación de la ciudad.
La sesión forma parte del caso que Sudáfrica llevó a la Corte el 29 de diciembre en el que acusa a Israel de violar la Convención contra Genocidio en el caso de Gaza. Egipto, Turquía, Nicaragua y Colombia se han sumado formalmente a la demanda legal sudafricana.
En su exposición, el país demandante sostuvo que la ofensiva de Israel contra Rafah supone un riesgo extremo para la entrada de suministros humanitarios y la provisión de servicios básicos en todo Gaza, así como para la rehabilitación del sistema sanitario y para la vida de los palestinos como pueblo.
La petición sudafricana incluye el acceso irrestricto y seguro de ayuda y personal humanitario a la Franja de Gaza.
Los representantes sudafricanos señalaron que Israel “casi ha borrado del mapa a Gaza, sacudiendo la consciencia de la humanidad” y afirmaron que el asalto a Rafah es el último paso en el proceso de destrucción de Gaza y del pueblo palestino.
“Fue Rafah la que trajo a Sudáfrica ante este tribunal hoy, pero son todos los palestinos como grupo nacional, étnico y racial los que necesitan la protección contra el genocidio que la Corte puede ordenar”, explicó la delegación sudafricana en la voz del letrado Vaughan Lowe.
Al referirse al argumento israelí de que sus acciones militares son en defensa propia, Lowe dijo que el derecho de un Estado a la autodefensa no le otorga el derecho a la violencia ilimitada.
La legítima defensa no puede justificar el genocidio. “La prohibición del genocidio es absoluta”, enfatizó y agregó que el derecho de un Estado a la legítima defensa no se aplica a un territorio que mantiene bajo ocupación.
Sudáfrica recordó que Israel actúa con una total impunidad y ahora lleva a cabo el ataque a Rafah pese a las advertencias de que incurriría en un acto genocida.
Tembeka Ngcukaitobi, uno de los abogados de la delegación demandante, aludió a la operación militar en Rafah como “el último capítulo de la aniquilación de la vida palestina”.
“Para que los palestinos puedan seguir existiendo como grupo protegido bajo la Convención contra el Genocidio, necesitan un lugar desde el cual reconstruir… Rafah es ese lugar, la última resistencia. (…) Sin Rafah, la posibilidad de reconstruir Gaza se perderá para siempre”, puntualizó.
Ngcukaitobi aseguró que Israel es consciente de la función central que en este momento tiene Rafah en la supervivencia de los palestinos, además de que conoce la orden de la Corte Internacional de Justicia de evitar toda acción genocida y las advertencias de los organismos de la ONU sobre las consecuencias de la ofensiva militar en esa ciudad.
Sin embargo, los líderes israelíes continúan incitando al odio y haciendo declaraciones expresas de intenciones genocidas, apuntó.
El jurista subrayó que la destrucción de Rafah sería un punto de no retorno para Palestina.
“Sin Rafah, no hay más vida palestina en Gaza, no hay más identidad palestina y no hay posibilidad de reconstrucción”, acotó.
El equipo legal sudafricano conminó al máximo tribunal judicial de la ONU a actuar, recalcando que el estado de derecho sólo podrá sobrevivir mediante órdenes de esa Corte.
“Si el estado de derecho ha de tener algún significado, que lo tenga hoy y con este caso. Ya no basta con ordenar el acceso sin obstáculos a la ayuda humanitaria cuando en realidad es la operación militar en Gaza la que lo impide. Ya no basta con alentar el cumplimiento de la Convención contra Genocidio cuando el desprecio deliberado de Israel por el estado de derecho internacional ha sido tan claro y público”, abundaron los abogados.
Sudáfrica precisó que esta puede ser “la última oportunidad” de la Corte de actuar para garantizar la supervivencia de los palestinos en Gaza.
Para cerrar sus planteamientos, los legistas sudafricanos insistieron en la necesidad imperiosa de que la Corte ordene “directa y explícitamente” a Israel cesar sus operaciones militares en Gaza. “Ninguna otra medida sería suficiente”, concluyeron. (Información DW).