Economía Internacional

ONU-OIT: La tasa de desempleo juvenil en el mundo cae a su nivel más bajo en 15 años

–(Foto ilustrativa Colombia Joven). El número de jóvenes desempleados en todo el mundo es el más bajo en 15 años, pero los países de Asia, el Pacífico y el mundo árabe, y las mujeres en particular, “no están cosechando los beneficios” de la recuperación económica posterior a la pandemia del COVID-19.

En el caso de América Latina, la región mostró una disminución significativa de su tasa de tasa de desempleo juvenil, situándose en 4,5 puntos porcentuales menos, el 13,4%, precisa el último informe de la agencia del trabajo de la ONU, la OIT sobre las tendencias del mercado laboral mundial, advirtiendo las grandes diferencias existentes entre países, géneros y generaciones.

Sin embargo, en las regiones la mayoría de los trabajos son a tiempo parcial, precarios e informales.

La incidencia del empleo temporal -trabajo remunerado con duración de los contratos inferior a 12 meses- ha aumentado en las dos últimas décadas en la subregión combinada de América Latina y el Caribe. Si se suma al trabajo por cuenta propia, otra forma de trabajo menos segura por su naturaleza y excluye los diversos beneficios de la protección social, el informe concluye que algo más de la mitad (51%) de los trabajadores adultos jóvenes de América Latina y el Caribe trabajaban en un empleo no seguro.

Igualmente preocupante es la constatación de que el año pasado más de uno de cada cinco jóvenes no trabajaba y no estudiaba ni recibía formación, una situación que la OIT denomina como los “ninis”.

“Si eres una mujer joven, el reto de permanecer en la escuela o conseguir un trabajo es doble: dos de cada tres jóvenes ‘ninis’ son mujeres”, señaló Sara Elder, jefa de Análisis del Empleo y Políticas Públicas de la OIT.

Otra novedad clave en el mercado laboral juvenil es que ahora es “más difícil que nunca” encontrar un trabajo decente y seguro, según la OIT, que calcula que casi 65 millones de jóvenes no tenían trabajo el año pasado.

La tasa de desempleo juvenil para 2023, del 13%, equivalente a 64,9 millones de personas, representa el nivel más bajo en 15 años y un descenso con respecto a la tasa anterior a la pandemia, del 13,8% en 2019. Se espera que siga cayendo hasta el 12,8% este año y el próximo. El panorama, sin embargo, no es el mismo en todas las regiones. En los Estados Árabes, Asia Oriental y Asia Sudoriental y el Pacífico, las tasas de desempleo juvenil eran más altas en 2023 que en 2019.

El informe también advierte de que los jóvenes se enfrentan a otros “vientos en contra” para encontrar el éxito en el mundo laboral. Señala que demasiados jóvenes de todo el mundo son ninis y que las oportunidades de acceder a empleos decentes siguen siendo limitadas en las economías emergentes y en desarrollo. En 2023, uno de cada cinco jóvenes del mundo, es decir, el 20,4%, era “nini”. Dos de cada tres de estos “ninis” eran mujeres.

Para los jóvenes que sí trabajan, el informe señala la falta de avances en la obtención de empleos decentes. En todo el mundo, más de la mitad de los trabajadores jóvenes tienen un empleo informal. Sólo en las economías de renta alta y media-alta la mayoría de los trabajadores jóvenes tienen hoy un empleo fijo y seguro. Y tres de cada cuatro trabajadores jóvenes de los países de renta baja sólo conseguirán un empleo por cuenta propia o un trabajo temporal remunerado.

El informe advierte de que la persistencia de las elevadas tasas de “ninis” y el crecimiento insuficiente de empleos decentes están provocando una creciente ansiedad entre los jóvenes de hoy, que son también la juventud más formada de la historia.

“Ninguno de nosotros puede esperar un futuro estable cuando millones de jóvenes de todo el mundo no tienen un trabajo decente y, en consecuencia, se sienten inseguros e incapaces de construir una vida mejor para ellos y sus familias. Las sociedades pacíficas dependen de tres ingredientes fundamentales: estabilidad, inclusión y justicia social; y el trabajo decente para los jóvenes está en el centro de los tres”, explicó Gilbert F. Houngbo, Director General de la OIT.

Además, el informe concluye que los hombres jóvenes se han beneficiado más de la recuperación del mercado laboral que las mujeres jóvenes. Las tasas de desempleo juvenil de mujeres y hombres jóvenes en 2023 eran casi iguales (12,9% para las mujeres jóvenes y 13% para los hombres jóvenes), a diferencia de los años anteriores a la pandemia, cuando la tasa de los hombres jóvenes era más elevada. Además, la tasa mundial de “ninis” de las mujeres jóvenes duplicó la de los hombres jóvenes (28,1% y 13,1%, respectivamente) en 2023.

“El informe nos recuerda que las oportunidades para los jóvenes son muy desiguales; con muchas mujeres jóvenes, jóvenes con medios económicos limitados o de cualquier origen minoritario que siguen luchando. Sin igualdad de oportunidades para acceder a la educación y a empleos decentes, millones de jóvenes están perdiendo la oportunidad de un futuro mejor”, añadió Houngbo.

El informe de la OIT reclama una mayor atención al fortalecimiento de las bases del trabajo decente como vía para contrarrestar la ansiedad de los jóvenes ante el mundo laboral y reforzar su esperanza en un futuro mejor.

En un mensaje dirigido a la juventud, las y los autores del informe les piden que sumen sus voces al llamdo en favor del cambio. “Tienen la posibilidad de influir en la política y abogar por un trabajo decente para todas las personas. Conoce tus derechos y sigue invirtiendo en tus capacidades”, dice el mensaje. “Forma parte del cambio que necesitamos para garantizar un mundo socialmente justo e inclusivo”.

Esta 12ª edición del GET para la Juventud marca el 20º aniversario del informe. En él se repasa lo que se ha conseguido en este siglo para mejorar las perspectivas laborales de los jóvenes y se considera el futuro del empleo juvenil “en una época caracterizada por las crisis y las incertidumbres”. Analizando las tendencias a más largo plazo, el informe concluye que:

El crecimiento de los servicios “modernos” y de los empleos manufactureros para los jóvenes ha sido limitado, aunque la modernización puede llegar a los sectores tradicionales a través de la digitalización y la IA.
No hay suficientes empleos de alta cualificación para la oferta de jóvenes que tienen estudios, especialmente en los países de ingresos medios.

Mantener el desarrollo de competencias al ritmo de la evolución de la demanda de competencias ecológicas y digitales será fundamental para reducir los desajustes educativos.

El creciente número de conflictos amenaza los medios de subsistencia futuros de los jóvenes y puede empujarlos a la migración o al extremismo.

Las tendencias demográficas, en particular el “terremoto de la juventud” africana, implican que la creación de suficientes empleos decentes será fundamental para la justicia social y la economía mundial.

El informe reclama una inversión mayor y más eficaz, entre otras cosas para impulsar la creación de empleo con un objetivo específico para las mujeres jóvenes, reforzar las instituciones que apoyan a los jóvenes en sus transiciones en el mercado laboral, incluidos los jóvenes ninis, integrar el empleo y la protección social para los jóvenes, y abordar las desigualdades globales a través de la mejora de la cooperación internacional, las asociaciones público-privadas y la financiación para el desarrollo.

Desigualdad por el lugar de nacimiento

“La mayoría de los trabajadores jóvenes siguen careciendo de protección social y permanecen en empleos temporales que les dificultan salir adelante como adultos independientes”, prosiguió Elder, añadiendo que sólo uno de cada cuatro trabajadores jóvenes en los países de bajos ingresos tiene probabilidades de tener un empleo regular y seguro, frente a tres de cada cuatro en los países más ricos.

Las presiones para encontrar trabajo pesan mucho sobre los jóvenes, según la agencia de la ONU para el trabajo, y dos de cada tres afirman que temen perder su empleo. Y ello a pesar de que la actual generación Z, que busca trabajo, “es también la cohorte de jóvenes más preparada de la historia”, insiste la OIT.

“El trabajo decente es un billete hacia un futuro mejor para los jóvenes. Y un pasaporte para la justicia social, la inclusión y la paz. El momento de crear oportunidades para un futuro mejor es ahora”, afirmó Elder.

En un llamamiento a los jóvenes trabajadores de todo el mundo para que pidan a sus gobiernos un cambio y mayores oportunidades de trabajo, la agencia de la ONU subrayó el sesgo de género existente en el mercado laboral, que sigue favoreciendo a los hombres en detrimento de las mujeres, ya que la tasa mundial de ninis entre las mujeres jóvenes era más del doble que entre los hombres jóvenes, con un 28,1% y un 13,1%, respectivamente.

Millones de personas excluidas

“Las oportunidades para los jóvenes son muy desiguales, y muchas mujeres jóvenes, jóvenes con medios económicos limitados o procedentes de cualquier minoría siguen teniendo dificultades”, dijo el director general de la OIT, Gilbert Houngbo. “Sin igualdad de oportunidades para acceder a la educación y a empleos decentes, millones de jóvenes están perdiendo la oportunidad de un futuro mejor”.

El responsable de la OIT insistió en que “ninguno de nosotros puede aspirar a un futuro estable cuando millones de jóvenes en todo el mundo no tienen un trabajo decente y, en consecuencia, se sienten inseguros e incapaces de construir una vida mejor para ellos y sus familias”.

“Millones de jóvenes en todo el mundo están bloqueados en su búsqueda de un trabajo decente”, puntualizó.

“Millones de jóvenes en todo el mundo están bloqueados en su búsqueda de un trabajo decente”, subrayó la OIT, añadiendo que, si bien el desempleo juvenil mundial cayó al 13% en 2023, por debajo de los niveles anteriores a la pandemia y con unas proyecciones que esperan nuevos descensos en 2024 y 2025-, esta recuperación está siendo “desigual”.

“En Asia Oriental (+4,3%), los Estados Árabes (+1%) y Asia Sudoriental y el Pacífico (+1%), las tasas de desempleo juvenil han seguido aumentando”, declaró Sara Elder, jefa de Análisis del Empleo y Políticas Públicas de la OIT.

“Las tendencias demográficas, en particular el ‘terremoto de la juventud’ en África, muestran que es fundamental crear suficientes empleos decentes para la justicia social y la economía mundial”, asegura la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Tendencias

Estas son algunas de las tendencias a largo plazo en el mercado laboral para los trabajadores más jóvenes que se destacan en el informe Tendencias Mundiales del Empleo Juvenil 2024 de la OIT:

-No hay suficientes empleos de alta cualificación para la oferta de jóvenes formados, especialmente en los países de renta media

-El crecimiento de los servicios “modernos” y de los empleos manufactureros para los jóvenes ha sido limitado

-Mantener el desarrollo de competencias al ritmo de la evolución de la demanda de competencias ecológicas y digitales será fundamental para reducir los desajustes educativos.

El informe de la OIT reclama una mayor atención al fortalecimiento de las bases del trabajo decente como vía para contrarrestar la ansiedad de los jóvenes ante el mundo laboral y reforzar su esperanza en un futuro mejor.

En un mensaje dirigido a la juventud, las y los autores del informe les piden que sumen sus voces al llamdo en favor del cambio. “Tienen la posibilidad de influir en la política y abogar por un trabajo decente para todas las personas. Conoce tus derechos y sigue invirtiendo en tus capacidades”, dice el mensaje. “Forma parte del cambio que necesitamos para garantizar un mundo socialmente justo e inclusivo”.

Esta 12ª edición del GET para la Juventud marca el 20º aniversario del informe. En él se repasa lo que se ha conseguido en este siglo para mejorar las perspectivas laborales de los jóvenes y se considera el futuro del empleo juvenil “en una época caracterizada por las crisis y las incertidumbres”. Analizando las tendencias a más largo plazo, el informe concluye que:

El crecimiento de los servicios “modernos” y de los empleos manufactureros para los jóvenes ha sido limitado, aunque la modernización puede llegar a los sectores tradicionales a través de la digitalización y la IA.

No hay suficientes empleos de alta cualificación para la oferta de jóvenes que tienen estudios, especialmente en los países de ingresos medios.

Mantener el desarrollo de competencias al ritmo de la evolución de la demanda de competencias ecológicas y digitales será fundamental para reducir los desajustes educativos.

El creciente número de conflictos amenaza los medios de subsistencia futuros de los jóvenes y puede empujarlos a la migración o al extremismo.

Las tendencias demográficas, en particular el “terremoto de la juventud” africana, implican que la creación de suficientes empleos decentes será fundamental para la justicia social y la economía mundial.

El informe reclama una inversión mayor y más eficaz, entre otras cosas para impulsar la creación de empleo con un objetivo específico para las mujeres jóvenes, reforzar las instituciones que apoyan a los jóvenes en sus transiciones en el mercado laboral, incluidos los jóvenes ninis, integrar el empleo y la protección social para los jóvenes, y abordar las desigualdades globales a través de la mejora de la cooperación internacional, las asociaciones público-privadas y la financiación para el desarrollo. (Información OIT-Naciones Unidas).