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Ante el fracaso de los gobernantes, le toca ahora a los pueblos movilizarse para detener la crisis climática: Petro

–Al inaugurar este lunes en Cali la Zona Verde de la COP16, el presidente Gustavo Petro manifestó que los gobernantes y las cumbres climáticas fracasaron en la tarea de detener la crisis climática, por lo que ahora el camino es la movilización de la humanidad en procura de preservar la vida en el planeta.

“Hemos fracasado como gobernantes, porque más nos hemos demorado en reuniones burocráticas y turismos planetarios que en dar soluciones efectivas”, sostuvo.

El mandatario colombiano explicó, por ejemplo, que los gobiernos y los poderes económicos se niegan recurrentemente a poner en marcha los instrumentos financieros que podrían aportar los recursos que se necesitan para afrontar con eficacia la crisis del cambio climático.

Al respecto, precisó: “Cuando hemos levantado la propuesta de cambiar la deuda externa de Colombia por acción climática e invertir nuestros recursos públicos –que van a fondos de pensiones de ricos en Nueva York o a la banca mundial–, cuando hemos dicho que nos queremos dedicar a cuidar y sembrar la selva amazónica para el beneficio de toda la humanidad o a cuidar esta selva del Pacífico y cuidar sus ríos para que el campesinado pueda vivir mejor sin necesidad de cortar el árbol, entonces nos responden no”.

En este punto, reflexionó sobre la falta de poder de decisión y de mecanismos efectivos de solución que, hasta ahora, han mostrado las cumbres climáticas que se realizan en el mundo.

“Las COP encerradas en desiertos para que no llegue la gente. Las COP encerradas en montañas de nieve para que no llegue la gente. Las COP sin gente humana y solo con burócratas no va a solucionar el problema de la crisis climática. No tienen poder de decisión. Nos dejan expósitos ante las inclemencias del clima, como ya vimos en el Amazonas o en el huracán del Caribe”, recalcó.

Red mundial para acelerar los cambios que necesita el mundo

Ante este hecho, el presidente Petro consideró que es el momento para que los movimientos y organizaciones sociales de los pueblos del mundo levanten la voz, se movilicen y asuman la misión que no han podido o no han querido liderar los gobiernos de los países.

“Nos toca a nosotros, porque queremos tener hijos, hijas, nietos, nietas”, dijo y agregó: “Ya no será simplemente una concertación de gobiernos, sino que tiene que ser una concertación de los pueblos del mundo. Ya no hay tiempo suficiente para esperar”, declaró.


En este sentido, el jefe de Estado le pidió a la ministra de Ambiente de Colombia, Susana Muhamad –quien asumió como presidenta de la COP16-, que lidere la creación y acción de una Red Mundial de Organizaciones y Pueblos del Mundo.

“Le pido a Susana (Muhamad) que coordine, como presidenta de la COP16, la opción de construir la gran Red Mundial de Organizaciones y Pueblos del Mundo que sea capaz de movilizarse, como humanidad, para detener la codicia, que es la gran causante de la crisis climática del mundo y, por tanto, de la vida planetaria”, subrayó el presidente.

Indicó que “esa red, interconectada por todos los métodos de interconexión actual, tiene que operar días de manifestaciones mundiales cada vez más, días de rodear el poder que se niega a la vida y que nos transmite a la muerte”.

No es mañana, es hoy

Ante los asistentes a la inauguración de la Zona Verde de la COP16, donde a partir de hoy se llevarán a cabo las actividades culturales, académicas y populares de la cumbre, el presidente Petro urgió: “Tenemos entonces que luchar hoy. No es mañana, no es en 50 años”.

“Tenemos apenas cinco años para provocar los cambios políticos en el mundo que permitan una nueva economía que, sin utilizar el carbón y el petróleo, pueda detener el envenenamiento de la atmósfera. Es poco tiempo. Ya no son los gobernantes; son los pueblos”, expuso el jefe de Estado.

Reiteró que “ya no se trata de declaraciones que no se cumplen. Ahora se trata de la movilización de toda la humanidad por su propia existencia en el planeta. La gravedad de los hechos lo demandan”.

“Este presidente de la República de Colombia tiene que decirles algo que ningún otro presidente de Colombia dijo: es que llegó el tiempo de la movilización de la humanidad o nos quedamos sin humanidad. Detener la crisis climática, preservar la biodiversidad, es preservar la humanidad y es preservar la vida”, concluyó el jefe de Estado.

De otro lado, el presidente Gustavo Petro instó a la dirigencia y al empresariado de la región Pacífica a apoyar la Reforma Agraria y de esa manera contribuir a mitigar los efectos de la crisis climática.

El jefe de Estado manifestó que la presión de los monocultivos en la región ha obligado a las poblaciones de la región a salir hacia la selva a buscar su medio de sustento, lo cual ha generado un impacto sobre la biodiversidad.

“Si la tierra fértil del Valle del Cauca se concentra en un solo cultivo y, a veces, bajo unos solos propietarios, el campesinado, los indígenas y las comunidades negras terminan saliendo hacia donde están las selvas porque no tienen otra oportunidad para vivir. Terminan arrumados en los barrios populares, bajo techos de cartón, como se conocía Agua Blanca”, dijo el mandatario.

En ese contexto, indicó el mandatario es necesario entregarles tierra fértil y buenos sistemas de crédito para sacarlos de la selva y de los páramos, donde generan un impacto negativo contra los recursos naturales.

“Se necesita una Reforma Agraria. ¿A dónde llevamos a los campesinos si deben salir voluntariamente de las selvas de Colombia, de los páramos de Colombia, de los lugares vulnerables desde el punto de vista ambiental? ¿A dónde los vamos a llevar? si no es a donde está la tierra fértil. Si no es donde desde antaño nuestros ancestros, los indígenas, nos indicaron que era mejor cultivar”, recalcó.

Apoyo a comunidades de El Plateado

En el mismo contexto, el jefe de Estado se refirió a la situación que viven las comunidades del corregimiento de El Plateado, en el municipio de Argelia, en el Cauca, donde las familias derivan su sustento de la economía ilegal de la hoja de coca.

Indicó que miles de familias campesinas de El Plateado quisieran que las tropas del Ejército salieran de la región “porque consideran que lo normal para sus vidas es que sus hijos no vayan a la escuela, sino que sus hijos vayan al sembradío de hoja de coca para cosechar la hoja y volverla pasta, venderla y poder sobrevivir”.

En ese sentido, el presidente Petro aseveró que otra sería la realidad de estas comunidades campesinas si tuvieran tierra fértil para trabajar y comercializar sus cosechas de productos legales en el exterior.

Enfatizó que esto sería posible “si hubiera una Reforma Agraria en Colombia, si pudiera haber crédito barato para ellos, si la banca pusiera las posibilidades del acceso al capital” y, además, si “los norteamericanos, que tanto se interesan por los problemas de los cultivos de hoja de coca en Colombia, ayudaran a vender esos productos legales en Estados Unidos o si los chinos ayudaran a venderlos allá en Shanghai”.

A renglón seguido, el presidente Petro afirmó que de esta manera los ríos del Pacífico podrían revivir y la selva con más biodiversidad por metro cuadrado del mundo podría existir en beneficio de toda la humanidad.