El próximo 14 de marzo los ciudadanos invidentes podrán ejercer su derecho al sufragio ya que la Registraduría Nacional imprimirá 185.000 tarjetas electorales en sistema braille, las cuales estarán ubicadas en cada una de las mesas de votación que se instalarán en el país.
La distribución de las tarjetas se realiza de acuerdo con un censo previo elaborado en coordinación con el Instituto Nacional para Ciegos, INCI, y con el histórico de las votaciones.
Los jurados deberán consignar en el formulario si la persona es invidente y si conoce el sistema y posteriormente entregar la tarjeta electoral correspondiente, que es diferente tanto en el diseño como en la cantidad de hojas debido a la implementación del lenguaje braille.
El ciudadano invidente o con limitación visual podrá llegar hasta la mesa de votación acompañado de una persona elegida por él mismo, aunque si manifiesta conocer el sistema braille no es necesario que entre acompañado al cubículo para votar.
La Registraduría Nacional del Estado Civil, impartió recomendaciones generales para que los Delegados como los jurados conozcan cómo ayudar a los ciudadanos que padezcan limitaciones y dolencias físicas que les impidan valerse por si mismos, entre quienes se encuentran las personas invidentes, sordas, mudas, cuadrapléjicas, parapléjicas o con trastorno mental parcial o total.
Estos ciudadanos podrán ejercer el derecho al sufragio ingresando con compañía hasta el interior del cubículo de votación. También podrán votar con compañía los mayores de ochenta (80) años o quienes padezcan problemas avanzados de la visión, siempre y cuando esa sea su voluntad y sean ellos mismos quienes elijan una persona de su confianza que los acompañe a sufragar.
El Consejo Nacional Electoral con respecto al derecho al voto de personas con alguna limitación señaló que el limitado físico podrá ejercer por sí mismo este derecho si considera que está en condiciones de hacerlo, pero esto no impide que, en caso contrario, solicite la colaboración de su acompañante.
Por lo tanto, el acompañante elegido por el sufragante con limitaciones, y siguiendo las instrucciones precisas del discapacitado, puede marcar la respectiva tarjeta electoral.