Con una ceremonia que se realizó en el centro de convenciones Cafam La Floresta en Bogotá, fue elegida la representante del Quindío, Sonia Quintero Serna como la Mujer Cafam 2010.

Esta mujer obtuvo el segundo puesto en el premio Comfenalco a la Mujer 2008 y se llevó el primer lugar en el certamen realizado en el 2009 entre 23 postuladas.

Su labor fue premiada por el jurado luego de conocer el trabajo realizado en las calles de Armenia con los niños, adolescentes y jóvenes que viven en condiciones vulnerables a través del programa Sembrando Esperanzas.

Actualmente cuenta con 77 beneficiados, 27 en diferentes colegios de la ciudad, 32 en el Inem y 18 en proceso de reinserción lo que representa un gran orgullo para esta mujer quien afirma que su labor “es la muestra fiel de que con amor, confianza, paciencia y compromiso se puede cambiar el rumbo de estas personas”.

“Con este premio se exalta a la mujer colombiana, en reconocimiento a su loable y meritoria misión en la estructura social de nuestro país; a todas aquellas representantes de este género que en diferentes escenarios de la vida nacional se destacan como líderes comunitarias, trabajadoras, estudiantes, profesionales, deportistas, investigadoras o artistas, contribuyendo al bienestar comunitario”, afirmaron los organizadores del evento.

Una estatuilla y un incentivo económico de 20 millones de pesos fueron entregados a la ganadora por parte de la presidenta honoraria Lina María Moreno de Uribe y el director del Premio Arcesio Guerrero Pérez.

El segundo y tercer lugar recibieron 9 millones de pesos que podrán invertir en su obra.

Nidia Quintero de Balcázar, Ana María Busquets de Cano, María Teresa Peresson de Riaño, Juan Lozano Ramírez y Germán Santamaría conformaron el grupo de jurado que se encargó de elegir a la Mujer Cafam 2010.

¿Quien es Sonia Quintero Serna?

Es docente de la institución educativa Inem José Celestino Mutis de Armenia.

De su hogar aprendió la bondad y la tarea de servir al prójimo. En 2006 inició el proyecto Sembrando Esperanzas, dirigido a niños, niñas y adolescentes de Armenia, para rescatarlos de la calle, contribuyendo a su resocialización y a la de sus familias. La experiencia fue acogida por la secretaría de Educación municipal a través del programa La Escuela Busca el Niño, cuyo objetivo es incluir a niños desescolarizados en el sistema escolar a través de oportunidades de reinserción social.

Diseñó e implementó estrategias orientadas a crear conciencia sobre la importancia de estudiar y formarse como ciudadanos. Hoy el programa cuenta con 77 niños de las zonas, y hasta la fecha ha rescatado 350 menores de la mendicidad, la delincuencia y el trabajo infantil.