Internacional

Momento decisivo en campaña electoral brasilera

La campaña para las elecciones presidenciales del domingo en Brasil llegó al momento decisivo con la candidata del oficialismo, Dilma Rousseff, en ventaja de 14 puntos porcentuales sobre el opositor José Serra, de acuerdo a los últimos sondeos.

Si en el primer turno el 3 de octubre, Rousseff quedó a apenas tres puntos porcentuales de liquidar la elección, en este segundo turno su ventaja parece prácticamente insalvable a 48 horas de la habilitación de las urnas.

El instituto de encuestas Ibope atribuyó a Rousseff una ventaja de 14 puntos sobre Serra. La encuestadora Datafolha apuntó este viernes que la ventaja sería de 12 puntos y Sensus de 15.

«Creo que ese escenario electoral está definido, a menos que ocurra una catástrofe política en las próximas 24 horas. Inclusive porque no logro ver en el candidato Serra una capacidad de reacción», dijo a la AFP el politólogo Carlos de Melo, del independiente Instituto de Enseñanza e Investigaciones (Insper) de Sao Paulo.

Aunque las encuestas fallaron en percibir en la primera ronda de las elecciones la fuerza del voto religioso que optó por la ambientalista y evangélica Marina Silva, «lo que en el primer turno se llamó el ‘factor Marina’ ahora no existe», dijo de Melo.

Después de semanas de duras acusaciones y polémicas sobre aborto, religión y corrupción, los dos candidatos evitaron los ataques personales en el último debate televisado la noche de este viernes, a las puertas de la elección del domingo.

Todas las preguntas del debate, emitido por la red popular TV Globo, fueron hechas por electores indecisos, que interrogaron a los candidatos sobre lo que realmente afecta a los brasileños: educación, salud, el futuro en el campo, los graves problemas de saneamiento, seguridad pública y hasta como superar el asistencialismo de los programas sociales.

«Esta campaña electoral ha sido un horror. Hemos tenido momentos pobrísimos, y los temas más importantes siquiera fueron mencionados», consideró de Melo, refiriéndose a los ataques y acusaciones de la campaña.

El polémico tema del aborto, que fue apuntado como una de las razones del éxodo de votos religiosos de Rousseff a Silva en el primer turno y que parecía una discusión a superar en la segunda vuelta, volvió al orden del día después de que el Papa Benedicto XVI se refirió al tema el jueves, exhortando a los obispos brasileños a expresarse al respecto.

El presidente Lula dijo el viernes que el Papa «no dijo nada nuevo» al exhortar a los obispos brasileños a tener una posición firme contra el aborto, ya que ese ha sido el discurso de la Iglesia «hace 2.000 años». Y subrayó que Brasil es un país democrático y laico.

Serra intentó usar el discurso del pontífice a su favor, en su propaganda electoral de radio que hizo referencia indirecta a Rousseff sugiriendo que en el pasado defendió la despenalización del aborto y ahora no.

El principal evento de la campaña de Serra el viernes fue una caminata por el centro de la gigante Sao Paulo, sin el candidato pero encabezada por el ex presidente Fernando Henrique Cardoso (1995-2002).

El presidente Luiz Inacio Lula da Silva se fue a la nordestina ciudad de Recife a hacer campaña por su candidata Rousseff.

Rousseff y Serra debían concentrar sus últimos esfuerzos de la campaña en una caminata en dos lugares diferentes de Belo Horizonte, capital del estado Minas Gerais, que es el segundo colegio electoral del país.

El domingo casi 136 millones de brasileños están llamados a elegir al sucesor del carismático Lula, entre Rousseff, de 62 años, y Serra, de 68. AFP