El presidente Hugo Chávez recibió con beneplácito la propuesta del gobierno estadounidense de considerar presentar un nuevo candidato a embajador en Venezuela después que rechazó la elección designación anterior del presidente Barack Obama.
En una televisada reunión de su gabinete ministerial, Chávez expresó el martes su esperanza para el diálogo con el gobierno de Estados Unidos luego de la conversación que sostuvo con la secretaria de Estado Hillary Clinton el fin de semana.
Clinton y Chávez se dieron la mano y conversaron brevemente durante la asunción de la mandataria brasileña Dilma Rousseff, el pasado 1 de enero.
«Si allá rectificaran de todo lo que dijo aquel señor, aquí también uno no puede estar aferrado a algo así», dijo el mandatario venezolano en alusión al otrora candidato de la Casa Blanca que esperaba la confirmación del Senado estadounidense como embajador en Caracas, Larry Palmer.
Chávez insistió que le dijo a la secretaria de Estado: «Mire, si hubiera una rectificación, nosotros también rectificaríamos».
«Yo pensé que ella (Clinton) iba a insistir en Palmer… y resulta que dieron la declaración de que el nombramiento de Palmer murió… expiró y que van a buscar otro candidato», relató.
«Bueno, ojalá nombraran a Oliver Stone», dijo en tono de broma el gobernante, entre risas. «Sean Penn, Oliver Stone ¿Quién más? (el escritor y linguista Noah) Chomsky. Tenemos muchos amigos allá. (Incluso) Bill Clinton», refirió al recordar sus contactos que repetidamente ha catalogado de amistosos con el ex mandatario estadounidense, esposo de Hillary.
Chávez durante su mandato de 12 años ha sido anfitrión de varias celebridades de Hollywood, entre ellos los actores Danny Glover, Tim Robbins y Kevin Spacey.
El cinesta Oliver Stone, ganador de tres premios Oscar, ha visitado Caracas en varias oportunidades, y filmó el documental «Al sur de la frontera» (South of the Border), donde el director mostró su desacuerdo con el trato hostil del ex presidente George W. Bush hacia Chávez.
Los dos gobiernos habían mostrado posiciones firmes en las últimas semanas. Estados Unidos revocó la visa del embajador venezolano Bernardo Alvarez luego de la negativa de Chávez a aceptar a un nuevo representante nombrado por Washington.
El lunes, luego del inesperado encuentro en Brasilia, el portavoz de Departamento de Estado P.J. Crowley dijo en conferencia de prensa que la candidatura de Palmer como embajador expiró al culminar la sesión legislativa del 2010, después de que el gobierno venezolano rechazara el mes pasado su beneplácito al diplomático estadounidense por haber respondido en un cuestionario del Congreso en que señaló que la moral es baja entre los militares venezolanos y que le preocupa que los rebeldes colombianos estén encontrando santuario en Venezuela.
Chávez además acusó a Palmer de ofender al gobierno venezolano al expresarse sobre varios asuntos delicados, entre ellos las acusaciones del Departamento del Tesoro en 2008 de que tres miembros de su círculo íntimo suministraron armas a los rebeldes colombianos y colaboraron con ellos en operaciones de tráfico de drogas.
En diciembre, el Departamento de Estado criticó fuertemente la ley con que la Asamblea Nacional saliente, dominada por el oficialismo, le otorgó a Chávez poderes para legislar por decreto durante 18 meses. Una nueva Asamblea se instalará el 5 de enero, con un mayor contingente de legisladores opositores.
El líder izquierdista se mostró cauteloso al afirmar que «nosotros seríamos muy ingenuos o pretenciosos si pensáramos que, que es un signo de debilidad, que hemos derrotado» a Estados Unidos. «No. Ellos tienen sus intereses, y nosotros los nuestros».
Chávez, desde que asumió el poder en 1999, frecuentemente usa las críticas al «imperialismo» de Estados Unidos para cerrar filas entre sus seguidores.
Pese a esas numerosas y frecuentes fricciones, los dos países están unidos por profundos lazos comerciales. Las finanzas del gobierno de Chávez dependen en gran medida de la venta de petróleo a Estados Unidos y Venezuela también importa grandes cantidades de bienes de consumo de ese país. Las ventas de crudo a Estados Unidos han disminuido en los últimos años, a medida que Chávez intentó diversificar su clientela y elevó las ventas a aliados como China. AP