Ocho personas murieron a tiros en Honduras cuando viajaban en un autobús en la noche del jueves cerca de la ciudad de Catacamas, 200 kilómetros al este de la capital, informaron las autoridades.
El oficial César Castillo, de la Policía Nacional, relató a radios locales que once personas se transportaban en el autobús, que “fue detenido por desconocidos”, tras lo cual les dispararon.
Siete de los pasajeros murieron al cabo del tiroteo, en tanto otros cuatro resultaron heridos y fueron trasladados a un hospital. El portavoz del Ministerio de Seguridad, Leonel Sauceda, confirmó sin embargo que uno de los heridos murió más tarde en el centro de salud. “Dos hombres y una mujer estaban recibiendo asistencia médica con la debida seguridad” previniendo que no los fueran a rematar en el hospital, añadió el portavoz.
Castillo señaló que entre los muertos hay cinco adultos, una niña y dos bebés, en tanto los heridos de bala son tres adultos, aunque originalmente había informado de que entre los hospitalizados había dos niños.
Sauceda estimó que “por las características del ataque, se trató de un ajuste de cuentas dirigido a alguna de las personas que iba en el bus”.
De acuerdo con el relato de testigos, los desconocidos estaban a la orilla de la carretera pavimentada entre las ciudades de Juticalpa y Catacamas y cuando el vehículo se aproximaba, le hicieron una señal de parada. El conductor del autobús no detuvo la marcha y recibió una descarga de fuego nutrido de fusiles AK-47.
“La policía está haciendo grandes esfuerzos con intensos operativos en el sector para tratar de dar con los responsables”, subrayó el portavoz del gobierno. AFP