Un tribunal de la ciudad de Londres (U.K), ordenó el jueves la extradición del fundador de Wikileaks, Julian Assange, a Suecia para somerterse a un juicio por presuntos abusos sexuales.
Assange, de 39 años, no ha realizado ninguna declaración ante el centenar de periodistas que esperaban su llegada a las puertas de la Corte londinense de Belmarsh, la cuál decidió la extradición del cerebro de Wikileaks.
El australiano niega haber cometido las agresiones sexuales denunciadas por dos mujeres suecas, aunque admite haber mantenido relaciones consentidas con ambas en agosto pasado.
Assange defiende desde el principio que su caso responde a motivaciones políticas por la difusión de miles de cables confidenciales de la diplomacia norteamericana y documentos secretos sobre las guerras de Irak y de Afganistán.
El principal miedo de la defensa de Assange es que Suecia pueda entregarlo a Estados Unidos, donde podría ser condenado a la pena de muerte si es acusado de alta traición.