En varias ocasiones, nuestro Partido ha abogado por resultados en la investigación de este crimen terrible, que golpeó no sólo a una persona y una familia, sino a todo un país que escuchaba con atención los lúcidos racionamientos y los llamados de alerta del doctor Gómez Hurtado.

En tal sentido, insistimos en demandar lo que ya el Directorio Nacional del Partido Conservador había pedido en varios comunicados públicos, a lo largo de estos 16 años desde aquel trágico 2 de noviembre de 1995:

1- Que la Fiscalía General de la Nación dé a conocer al país el estado de las investigaciones tendientes a esclarecer las causas y circunstancias de este crimen, así como sus autores e instigadores.
2- Que esta entidad investigadora allegue y tenga en cuenta los nuevos indicios y testimonios como los recogidos por la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes, en Colombia y en el exterior, los cuales implicarían un detenido examen, como parte fundamental de esta investigación.

3- Que todas las instituciones y organismos de Estado, en lo que sea de su competencia, colaboren para que llegue a buen término la investigación por este asesinato y para que sean finalmente conocidos y castigados los culpables, como sucedió para fortuna de todos, con el caso del doctor Luis Carlos galán luego de 22 años y 13 días de su asesinato.

La mejor forma de honrar el recuerdo de un hombre que nunca tuvo miedo a decir y explicar su verdad, es esclarecer los hechos que condujeron a su prematuro final. El magnicidio de Álvaro Gómez Hurtado no puede seguir impune.