Bogotá Judicial

Asesinato de médico en Cami de las Cruces pudo obedecer a disputa por herencia

Las autoridades comenzaron a barajar una nueva hipótesis en el caso del asesinato del médico, Humberto Giraldo, quien murió a causa de una ataque sicarial cuando atendía a un paciente el pasado 16 de marzo. De acuerdo con la Fiscalía el homicidio pudo haber obedecido a una disputa por una millonaria herencia.

Fuentes cercanas a Radio santa fe, confirmaron que el Ente Investigador ha puesto especial atención a una multimillonaria demanda de familia que instauró el médico para ser reconocido legalmente como compañero sentimental del empresario de seguros, Eudoro Carvajal Ibáñez, quien falleció a mediados de 2011 a causa de cáncer.

Ocho meses después del deceso del empresario, quien era presidente y propietario mayorista de las aseguradoras Cóndor y Aurora, además de varios muebles inmuebles en diversas capitales del país, el medico Giraldo instauró una demanda ante un juez de familia para reconocer la sociedad patrimonial.

La acción legal interpuesta por Giraldo fue asumida por el Juzgado Once de Familia de Bogotá, y aún no ha definido el embargo y secuestro solicitado por Giraldo.

En caso de que el juzgador hubiera fallado a nombre del asesinado médico, Giraldo García se habría apropiado del emporio económico de su pareja.

Por su parte, el pasado 16 de abril se entregó ante la Policía Metropolitana de Bogotá, un menor de 13 años, quien afirma haber participado en el atentado con arma de fuego que le quitó la vida al médico.

De acuerdo con la Policía, el menor de edad se presentó ante las autoridades de forma voluntaria, y fueá presentado ante la unidad de menores de la Fiscalía General de la nación para definir su situación judicial.

El doctor Giraldo se desempañaba hacía 25 años como medico general en este centro hospitalario, ubicado entre carreras sexta y quinta con calle 1B, y murió cuando fue impactado de bala cuando atendía una consulta.

De acuerdo con los trabajadores del centro asistencial, el cuerpo médico ha sido amenazado en varias ocasiones por varios usuarios, que en la mayoría de los casos exigen atención inmediata, por lo que no se descarta que la muerte del profesional de la salud obedezca a este tipo de amenazas.

Los usuarios que allí laboran exigieron a la Secretaría de Salud y a la Policía de Bogotá, la presencia permanente de las autoridades en el centro médico.