Con la participación de más de mil campesinos de cinco departamentos y la ruralidad de Bogotá y la proyección de ventas cercanas a los mil millones de pesos, este viernes 1 de junio de 2012, se llevará a cabo una nueva versión de los Mercados Campesinos en la Plaza de Bolívar.
Entre las seis de la mañana y las cuatro de la tarde, se llevará a cabo el evento que contará con la participación del Alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro; el Secretario de Desarrollo Económico, Jorge Pulecio, y los directivos del Comité de Interlocución Campesino y Comunal -CICC-.
Como es tradicional, esta versión contará con el festival gastronómico y artesanal, presentaciones artístico-culturales y se realizará un acto simbólico de denuncia a la Ley 1518 de 2012 por medio de la cual se aprueba el ‘Convenio internacional para la protección de las obtenciones vegetales’, que afectará el uso de semillas nativas y criollas por parte de los campesinos.
En total, la participación es de unos 80 municipios de los departamentos de Boyacá, Cundinamarca, Tolima y Meta (regiones que abastecen alrededor del 65 por ciento de la demanda de los alimentos de la Capital), y también tienen presencia con sus mercados las comunidades afro-descendientes, indígenas y población rom (gitana), lo que hace de ésta, una actividad pluri-étnica. Los consumidores bogotanos podrán ahorrarse hasta un 30 por ciento en el valor de los productos adquiridos durante la jornada.
Este trabajo, que se hace en el marco del Plan Maestro de Abastecimiento de Alimentos y Seguridad Alimentaria para Bogotá, coincide con la celebración del Día del Campesinado Colombiano, una población en el que el gobierno de la ‘Bogotá Humana’, a través de la Secretaría de Desarrollo Económico, ha puesto especial énfasis.
Para el Secretario de Desarrollo Económico, Jorge Pulecio, “la Capital del país por primera vez va a invertir en la economía campesina de la eco región una cifra considerable de 100.000 millones de pesos, con el fin de ayudar a que esa economía sea sostenible frente a los riesgos del TLC con Estados Unidos, pero también frente a la amenaza de los agro combustibles. “En esta administración creemos que la eco-región central debe mantener la producción verde de alimentos para los bogotanos y la región central, esto frente a la posibilidad de que en algunos años solamente veamos plantaciones de caña de azúcar y planta africana para la producción de etanol”.
Según Pulecio, entre los más afectados por el TLC están los productores de arroz, trigo, cebada y algunos núcleos de fríjol; “nos preocupan los lecheros, pues solo sobrevivirán productores de lácteos que emigren de la leche cruda a quesos, yogures, helados, que pongan valor agregado y eso implica inversión en tecnología, aprendizaje, conocimiento de mercados, que los campesinos se asocien, se requieren grandes escalas”.
Para la Administración Distrital también inquieta el sector avícola, la importación de vísceras de res y de manera especial lo que va a llegar de alimentos procesados, pre-cocidos, embalados, productos de mejoramiento genético -transgénicos-, que pueden sacar del mercado a la oferta de la economía campesina, población que podría emigrar para Bogotá.