Con medida de aseguramiento, detención preventiva sin beneficio de excarcelación, fue afectado el ex jefe paramilitar Salvatore Mancuso Gómez, por su presunta responsabilidad en los homicidios de los hermanos Eliseo y Eder Narváez Corrales, líderes de los campesinos desplazados de la Hacienda Bellacruz en febrero de 1996.
De acuerdo con la decisión adoptada por un fiscal de la Unidad Nacional de Derechos Humanos y DIH, Mancuso Gómez incurrió, supuestamente, en los delitos de homicidio agravado en concurso con tortura, como posible coautor material.
El doble homicidio fue perpetrado el 28 de septiembre de 1996, cuando los Narváez Corrales fueron sacados de su residencia en el municipio de Pelaya (Cesar), y posteriormente fueron ultimados con disparos de arma de fuego.
Mancuso Gómez está recluido en la cárcel Norhern Neck Jail de Warsaw en Viriginia, Estados Unidos.