En la aplicación de los operativos, adelantados por la Subdirección de Inspección, Vigilancia y Control (IVC), 248 establecimientos comerciales fueron intervenidos y 50 fueron cerrados, en su mayoría, por infringir el horario de funcionamiento, licor adulterado, presencia de menores de edad, alteración del orden público y de convivencia y destino de uso del inmueble.
Las entidades que participan en estos continuos operativos son: Policía Metropolitana de Bogotá; las secretarías General – IVC, de Gobierno – Asuntos Locales y Dirección de Seguridad, Salud, Ambiente e Integración Social; Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá; Alcaldías Locales; Personería; Personas Jurídicas y Derechos de Autor.
Entre septiembre de 2011 a octubre de 2012, se han intervenido las localidades de: Kennedy, Chapinero, Antonio Nariño, San Cristóbal, Usaquén, Barrios Unidos, Candelaria, Teusaquillo, Santa Fe, Mártires, Puente Aranda, Engativá y Fontibón.
Las localidades que presentan incumplimiento del Decreto 484 de 2011, que establece la no venta de licor en un perímetro no menor a 200 metros alrededor de centros educativos universitarios en horario diurno son Chapinero, Candelaria y Santa Fe.
Kennedy, Chapinero, la Primero de Mayo y Cuadra Alegre, al sur de la ciudad, son los sectores que presentan el mayor número de irregularidades y niveles de violencia en establecimientos comerciales dedicados a la venta de licor y entretenimiento nocturno.
Por su parte, el sector de bares de Teusaquillo se ha organizado para cumplir la normatividad logrando bajar los niveles de conflictividad. Esto gracias a la articulación, a la autorregulación y corresponsabilidad bajo la estrategia de pacto de convivencia de la Secretaría de Gobierno.
Con estos fuertes operativos en los que se intervienen diferentes zonas de la capital, la Administración Distrital busca disminuir los niveles de conflictividad y hacer de la rumba bogotana una rumba más sana y segura.