Las autoridades venezolanas entregaron a una comisión de la Policía Nacional, encabezada por el Director de la DIJIN, a Daniel “El Loco” Barrera, considerado como el último gran capo del narcotráfico. Junto a él fueron enviados otros cinco delincuentes, incluido alias “Jota”, el número uno del Clan Cifuentes Villa.

Barrera Barrera, quien fue sorprendido frente a la iglesia El Ángel, ubicada en la carrera 23 con calle 10 de esa ciudad, en el Estado Táchira, cuando realizaba una llamada desde una cabina telefónica, será notificado de las órdenes de captura en su contra.

Una de las órdenes cumple fines de extradición hacia los Estados Unidos por conspiración para lavar dinero y narcotráfico, y otra por los delitos de tráfico, fabricación y porte de estupefacientes, emitida por un Juez de la República.

Luego, “El Loco” será conducido a las salas de detenidos de la DIJIN para la reseña dactilar y quedar a la espera de que el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) defina el lugar de reclusión de este individuo.

Daniel Barrera fue detenido en el marco de la Operación “Armadura de Efesios”, liderada por el Director General de la Policía Nacional y el Director de Inteligencia de la Institución desde Washington, lográndose además del objetivo principal, el arresto de alias “Lucho” (su conductor y escolta) y alias “Rocío” (su persona de confianza para temas logísticos), así como la incautación de seis computadores y un sofisticado equipo para el desvío de llamadas telefónicas.

Junto al capo, quien logró hacer alianza con las Farc, las bandas criminales y los carteles mexicanos, fueron deportados bajo la figura administrativa de expulsión Jorge Milton Cifuentes Villa, reconocido narcotraficante incluido en la lista prioritaria del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos y capturado el pasado jueves en el Estado Anzoátegui, así como Rusbel Alfonso Núñez López, José Nicolás Cure Velásquez, Edgardo Luis Rosemberg Contreras y Eduardo Acosta Mejía.

Mientras alias “Jota”, empresario de fachada y socio preferido de Joaquín “El Chapo” Guzmán, se convirtió en objetivo prioritario para las autoridades norteamericanas, los otros tres colombianos fueron capturados a comienzos de agosto en el Estado Zulia, presuntamente vinculados a la banda criminal de “Los Rastrojos”.

En Colombia son requeridos ante la justicia por narcotráfico, concierto para delinquir, homicidio, porte ilegal de armas, falsificación de documentos y concusión.

Acosta Mejía, oriundo de República Dominicana, tiene orden de captura vigente por narcotráfico según hechos ocurridos en 2010 cuando pretendía viajar desde Rionegro a la ciudad de Nueva York.