El Sena y el Instituto para la Economía Social, firmaron un convenio por 3 mil 862 millones dirigido a la formación y capacitación para el trabajo de poblaciones segregadas y discriminadas de los estratos 1 y 2.

Los beneficiados serán los recuperadores ambientales y recicladores, víctimas del conflicto armado, vendedores informales en el espacio público, personas con discapacidad, jóvenes de familias con bajos ingresos, mujeres cabeza de hogar, minorías étnicas, población LGBTI, entre otros.

Los trabajadores del Ipes buscaran a estas personas en los territorios, con el propósito de brindarles una asesoría y direccionarlos al proceso formativo que se ajuste a sus intereses y necesidades.

Este convenio tiene vigencia de dos años y hace parte del nuevo proceso de emprendimiento de la entidad, para que las personas de estos grupos poblacionales presenten iniciativas productivas basadas en el acceso al microcrédito y al crédito asociativo, y reciban formación a la medida para impulsar su proyecto productivo.

De las personas formadas, mil 480 podrán recibir su título como técnicos, entre ellos jóvenes de sectores vulnerables y otros emprendedores que deseen continuar su proceso, y puedan cumplir con las 1360 horas que se requieren para alcanzar este nivel educativo.

Otras personas que tengan experiencia empírica en alguna competencia específica, podrán participar en procesos para validar ante el Sena sus conocimientos y obtener su certificación, en lugares que el Ipes determinará. Se abrirán dos puntos de atención para implementar el servicio público de empleo del Sena, destacado por su estrategia de intermediación laboral a nivel nacional.

Para la segunda etapa, el Ipes prevé ampliar la alianza con el Sena, para fortalecer procesos de emprendimiento, proyectos productivos y acceso al crédito a través del Fondo Emprender.

Según Jorge Pulecio, director del Instituto para la Economía Social, “el Ipes continuará apoyando a la gente con iniciativas productivas, que de manera autónoma generen su empleo y sus ingresos, y promoviendo el emprendimiento y el acceso al crédito para mejorar las condiciones de empleabilidad de la economía popular”.

Para atender este convenio, el Instituto para la Economía Social conformó un equipo de profesionales en diferentes áreas que asesorarán y acompañarán los emprendimientos de personas de los grupos poblacionales señalados, en centros de atención en las localidades, para que de esta manera, puedan acceder más fácil a estos programas en sus territorios.