Gobierno adelanta esfuerzos para conjurar el nuevo paro cafetero
El Gobierno por medio del ministro de Agricultura, Francisco Estupiñán, y los líderes del movimiento “Dignidad Cafetera”, adelantan una nueva etapa de diálogos orientada a conjurar el programado paro agrario de mediados de agosto.
“Estamos acá para un diálogo franco, sincero y constructivo. El gobierno del presidente Santos ha hecho un esfuerzo sin igual, en materia fiscal, para ayudar a los cultivadores”, indicó el ministro Estupiñán Heredia al confiar en un entendimiento con los dirigentes de Dignidad Cafetera.
“El mensaje es claro. El gobierno del presidente Santos y los ministerios de Agricultura y de Hacienda, estamos dispuestos a trabajar, a dialogar, dentro de un espíritu democrático, abierto, sin inamovibles de ninguna clase y sin limitaciones que afecten el resultado final porque en últimas el que pierde es el país completo”, indicó el titular de la cartera agropecuaria.
“Sería injusto con otros sectores agropecuarios llegar a situaciones extremas”, subrayó Estupiñán Heredia al advertir sobre las consecuencias de un eventual paro sobre la salida y comercialización de las cosechas que están por salir en agosto.
“Creo que podemos superar esta situación”, subrayó el ministro.
“Hay que desarmar los corazones”, dijo en la instalación de la mesa de trabajo, la gobernadora del Quindío, Sandra Hurtado, anfitriona del encuentro.
A la reunión asisten el ministro de Agricultura, Francisco Estupiñán; el gerente de la Federación de Cafeteros, Luis Genaro Muñoz; el presidente de Finagro, Luis Eduardo Gómez; el presidente encargado del Banco Agrario, Francisco Solano; el delegado cafetero del Gobierno Nicolás Pérez, parlamentarios, mandatarios locales y los principales líderes de Dignidad Cafetera.
Previo al inicio de las conversaciones, el ministro visitó una cooperativa cafetera para verificar el procedimiento del pago del PIC al momento de efectuarsde la venta de una carga de café. Visitó también el centro de Montenegro en donde con coplas y danzas fue recibido por los montenegrinos.