Un hombre, que estaba paralizado hasta la cintura, logró caminar nuevamente gracias a un tratamiento que utilizó las células olfativas enfundadas (OEC) de su nariz para ser transplantadas a su médula espinal.
Esta técnica había dado buenos resultados en pruebas de laboratorio, pero jamás había sido experimentada con éxito en el ser humano.
Darek Fidyka, un bombero búlgaro de 40 años, es la primera persona en el mundo que se recupera de un desgarramiento total de los nervios de la columna vertebral, según un artículo publicado el martes en la revista científica Cell Transplantation.
Fidyka perdió la movilidad de sus piernas hace cuatro años luego de ser acuchillado por el exmarido de su compañera. Hace dos años comenzó con el proceso de recuperación, que consistió en dos operaciones por un equipo de médicos dirigido por el cirujano Pawel Tabakow, de la Universidad de Wroclaw en Polonia.
Hoy, el paciente puede caminar con un andador e incluso conducir un automóvil y se encuentra en un proceso de reeducación sobre cómo utilizar sus piernas.
Esta operación sin precedentes es el resultado de 12 años de investigaciones, dijo el martes el Dr. Tabakow.
“Desde hace 12 años, nosotros llevamos a cabo investigaciones sobre la posibilidad de ayudar a los pacientes que sufrieron un desgarramiento total de la espina dorsal y que están condenados a desplazarse en silla de ruedas hasta el fin de sus días”, explicó Tabakow en un comunicado del hospital universitario de Wroclaw.
Los primeros resultados positivos aparecieron tres meses después de la operación, financiada por la Nicholls Spinal Injury Foundation y la Fundación Británica sobre las Células Madre. Otros tres meses después, el paciente era capaz de caminar con la ayuda de barras paralelas.
“Para mí, es todavía más impresionante que los primeros pasos del ser humano en la Luna”, afirmó el profesor Geoffrey Raisman, del Instituto de Neurología del University College de Londres (UCL).
“La operación suministra un puente que permite a las fibras nerviosas seccionadas crecer sobre el vacío”, resumió el profesor Raisman.
“Cuando comienza a volver, uno se siente revivir, es como si naciera nuevamente. Es una sensación increíble, difícil de describir”, declaró Fidyka en el programa Panorama de la BBC, que tuvo un acceso exclusivo al paciente y a los médicos.
Las imágenes difundidas por el canal británico muestran al paciente atravesando un puente con ayuda de un andador.
“Yo sabía que sería (un proceso) difícil y prolongado, pero nunca quise aceptar la idea de pasar el resto de mis días en una silla de ruedas”, afirmó.
Alain Privat, un investigador del Instituto Nacional de la Salud y de la Investigación Médica (INSERM) francés, especializado en la reconstrucción de la médula espinal, recomendó “prudencia” frente a estos resultados, destacando que la operación debía ser “reproducida para que se pudieran sacar conclusiones”.
“Sólo un verdadero ensayo (clínico) permitirá mostrar que es sin lugar a dudas el hecho de haber injertado las OEC lo que hizo funcionar nuevamente a la médula espinal”, dijo.
Luego agregó que entre las dudas que deben ser aclaradas, habría que confirmar que la médula espinal había sido totalmente seccionada.