El ministro de Justicia, Yesid Reyes, defendió en la ONU la necesidad de definir nuevos enfoques para luchar contra el problema de las drogas, ya que según él, las políticas y las herramientas actuales son “inadecuadas e insuficientes”.
“Pese a los grandes esfuerzos que se hacen para acabar con los cultivos ilícitos, no solo estamos lejos de conseguir su eliminación, sino que comienza a percibirse un aumento de los mismos”, afirmó el ministro Reyes, quien participó hoy en una reunión organizada por la Asamblea General de la ONU para preparar una sesión especial sobre el problema de las drogas que tendrá lugar en abril próximo.
A lo anterior, el alto funcionario agregó: “Si no somos conscientes de que el mercado ilícito de las drogas muta continuamente para evadir la acción de las autoridades, las nuevas realidades terminarán por opacar los importantes avances que se han conseguido”.
En el debate otros altos funcionarios de América y de la ONU pidieron hacer un “balance sincero” de las distintas convenciones internacionales que rigen la lucha contra las drogas, sin que ello implique su modificación.
“Declaramos una guerra que no se ha ganado, por eso resulta imperativo idear y acordar a nivel global políticas e intervenciones que nos permitan responder de manera más humana, inteligente y efectiva a este enorme desafío”, agregó el ministro Reyes.
Para el ministro, es necesario eliminar la pena de muerte para los delitos relacionados con las drogas, pero también “perseguir de manera más efectiva la delincuencia organizada internacional”.
Al igual, el ministro Reyes propuso despenalizar el consumo de drogas y determinar medidas alternativas al encarcelamiento para delitos menores relacionados con este tema.
Por último, defendió la necesidad de buscar enfoques territoriales para enfrentar este problema y comentó que el sistema internacional no puede seguir basándose en lineamientos idénticos para enfrentar distintos problemas.