Farc afirman que “desminado” en El Orejón está paralizado por presencia de grupos paramilitares en la zona
–Los cabecillas de las Farc instalados en La Habana, Cuba, reportaron este viernes que el plan piloto de “desminado” en la vereda El Orejón, del municipio de Briceño, en Antioquia, se encuentra paralizado debido a la presencia de grupos paramilitares.
El pronunciamiento lo hacen en un comunicado, que precisamente titulan “Presencia paramilitar paraliza acción en El Orejón”, en el cual, sin embargo, reiteran el interés del grupo guerrillero “de avanzar con certeza en la edificación de la paz para Colombia”.
Al efecto, destacan “seis cese el fuego unilaterales, incluyendo el que se inició el pasado 20 de julio, ratificado en el día de ayer; liberaciones de prisioneros de guerra, el acuerdo sobre limpieza y descontaminación del territorio de la presencia de minas antipersonal, artefactos explosivos improvisados y municiones sin explotar o restos explosivos de guerra en general, son gestos de desescalamiento que afirman la voluntad y decisión de paz que acompaña el espíritu de cada uno de los integrantes de las Farc”.
Luego hacen referencia al “acuerdo en la mesa de conversaciones de iniciar el proceso de descontaminación territorial de explosivos” y añaden que “se definieron dos sitios, en el departamento del Meta y en la vereda el Orejón, municipio de Briceño, norte del departamento de Antioquia”.
En seguida advierten que “El Orejón” se ha proyectado “en la esperanza de que sí es posible la reconciliación de la nación, dado que mancomunadamente, combatientes de las fuerzas militares y guerrilleros de las Farc, desarrollan una activa labor humanitaria junto con los habitantes de la comunidad y bajo la coordinación de la Agencia Popular Noruega (APN)”.
Y agregan: “Hemos avanzado en el plan piloto hasta la tercera fase, enfrentando las dificultades que caracteriza a todas las comunidades agrarias de Colombia, azotadas por el abandono estatal, el desplazamiento y la violencia” y subrayan que “a estas realidades se sumó el accidente que ocasionó heridas a dos desminadores y la muerte de Jesús Martínez Jaraba, generando un sentimiento de luto en la misión humanitaria de guerrilleros y soldados, como al conjunto de la mesa de conversaciones”.
No obstante, hablan luego de “las preocupaciones de los habitantes del Orejón y Pueblo Nuevo crecen por la larga historia de promesas incumplidas por parte del Estado” y reseñan una “crisis humanitaria” a la cual, advierten, “se suma la intimidación permanente de grupos paramilitares que amenazan la libre movilidad y el abastecimiento de víveres a la comunidad”.
Precisan que “estas estructuras de terror actúan abiertamente, a ojos de todos los pobladores del municipio de Briceño, sin que las fuerzas militares y de policía desarrollen acciones contra ellos. En la región todos saben que estos grupos tienen asentamiento permanente en la vereda las Auras”.
Y concluyen señalando que “por estas razones la comunidad del Orejón ha solicitado acciones concretas por parte del gobierno, obligando a paralizar el desarrollo de la fase tres del plan piloto” y “reclaman certeza de que el gobierno va a despejar el territorio de la presencia de grupos paramilitares y a implementar planes de sustitución de los cultivos de uso ilícito que les tocó asumir como única forma de sobrevivencia”.