–Según la Organización de Naciones Unidas, ONU, este 2016 la economía mundial crecerá sólo 2,4 por ciento, como consecuencia de diferentes variables que han impactado los costos de materias primas, restricciones fiscales y monetarias y las prolongadas crisis en Brasil y Rusia, entre otros factores.

En vista de los resultados negativos, la ONU redujo las proyecciones medio punto porcentual con respecto al estimado divulgado en diciembre pasado.

El secretario general adjunto de la ONU y titular del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de Naciones Unidas, DESA, Lenni Montiel, hizo las precisiones al presentar el informe semestral de perspectivas económicas.

DESA colocó el crecimiento de este año en el mismo nivel de 2015, atribuyendo el cambio, entro otros factores, a la baja de las previsiones a la debilidad persistente de la demanda agregada en los países desarrollados.

Otros elementos negativos fueron los bajos precios de las materias primas, los crecientes desbalances fiscales y de cuenta corriente y las restricciones de las políticas fiscales y monetarias, que han afectado a las economía exportadoras de bienes básicos en África y América Latina, explicó el secretario general adjunto de la ONU y titular de DESA, Lenni Montiel.

“La debilidad de la economía mundial supone retos significativos para los Estados miembros en todas partes y, desde luego, para el sistema de la ONU de impulso al desarrollo. Muchos países de África, la Mancomunidad de Estados Independientes y América Latina han revisado a la baja sus proyecciones durante los últimos meses”, dijo.

Destacó también las prolongadas crisis en Brasil y Rusia, por los graves efectos secundarios que tienen a nivel regional.

Montiel agregó que la situación se ha agravado debido a los eventos climáticos extremos, los desafíos políticos y las grandes salidas de capital de muchas regiones en desarrollo.

Ante este panorama, la ONU consideró que hace que las mayores economías implementen políticas más balanceadas, proactivas y coordinadas para impulsar el crecimiento mundial y permitir avanzar en la Agenda de Desarrollo 2030.

CONTRACCION DEL COMERCIO AGROALIMENTARIO

A propósito del tema, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), reportó a principios de la semana que las exportaciones e importaciones agroalimentarias se contrajeron en América Latina desde el tercer trimestre de 2014 y continúan esa tendencia.

Si bien el comercio agroalimentario tiene un saldo comercial positivo –la región exporta más de lo que importa– éste se ha reducido en los últimos dos años a tasas de 3,5% y 3,6% respectivamente.

La FAO explicó que esa baja responde a la caída de los precios de los productos básicos que exporta Latinoamérica, además de que hay una menor demanda de los productos de exportación, lo que afecta sobre todo a los países de Sudamérica.

Argentina y Brasil, los países que suman más de la mitad de las exportaciones agroalimentarias de la región, fueron los más afectados con reducciones en sus envíos de 8% y 10% respectivamente.

Por el contrario México, tercer exportador de la región, y algunos países centroamericanos incrementaron sus exportaciones en comparación al año anterior.