El coste de las guerras en Oriente Próximo asciende a más de 9 billones de euros, casi el PIB de EEUU
Por primera vez en 60 años la fundación de pensamiento asiático Strategic Foresight Group, ha contabilizado el precio social, psicológico, económico y medioambiental que se ha tenido que pagar por los múltiples conflictos en Oriente Próximo desde hace 17 años.
Más de 9 billones de euros es el precio que el mundo ha pagado por guerras como la del Golfo, la de Irak o el grave conflicto entre israelíes y palestinos.
Ni si quiera el número de muertos (10.000 en dos Intifadas o 500.000 entre las dos guerras del Golfo), ni el número de desplazados, ni la cantidad de niños asesinados consiguen superar tal cantidad.
Desde el año 2000, los conflictos en la zona han sufrido una fuerte metamorfosis que ha provocado el incremento de tensiones y, por tanto, de más conflictos. Los palestinos están representados ahora por dos formaciones con fuertes fricciones entre ellas, Hamás y Al Fatah.
Desde 2003 Irak se encuentra ocupado por EEUU lo que ha añadido una nueva dimensión. La guerra entre el Líbano e Israel en 2006 lo complica todo aún más. Al Qaeda, Irán y su programa nuclear, Afganistán, decenas de enfrentamientos que ha ampliado lo que comenzó siendo un conflicto territorial a múltiples dimensiones culturales, psicológicas y, en definitiva, mundiales.
El informe, realizado por 50 expertos y líderes de la región, explica que si en 1991 se hubiera resuelto el conflicto de Oriente Próximo, casi todas las familias en el mundo árabe, así como en Israel, estaría disfrutando el doble de la renta per cápita que hoy. Por ejemplo, el PIB de Irak podría haber sido de más de 226.000 millones de euros en lugar de los 44.000 que se esperan para 2010.
En el caso del conflicto entre Israel y Palestina los datos son reveladores. Tan sólo desde el año 2000, los palestinos han perdido más de 100 millones de horas esperando en los puntos de control entre Ramallah y Jerusalén. En la actualidad alcanzó más del 50% de las operaciones industriales incluso antes de la operación ‘Plomo Sólido’ iniciada por Israel el pasado mes de diciembre.
Los costes de Israel son también significativos en términos humanos y psicológicos con un país que ha sufrido más de 34.000 ataques con misiles desde 2000. Casi 1.000 ciudadanos israelíes han perdido la vida durante el mismo período y 123 menores han sido asesinados en ataques a cafeterías, escuelas y autobuses. Más del 90% de los israelíes viven con miedo.
El informe argumenta que un acuerdo de paz haría viables una serie de proyectos, como acuerdos de suministro de gas, líneas ferroviarias y el comentado canal entre el mar Rojo y el mar Muerto. También proporcionará dividendos de paz a todos los países de la región, incluyendo 3.327 euros al año por hogar israelí, 375 euros por hogar egipcio y 940 euros por familia jordana.
El informe no propone soluciones, pero augura un futuro más que negro de no poner fin a la situación que vive desde hace décadas la zona. Miles de muertos, coste medioambientales gravísimos, colapso económico… Un panorama desolador al que urge buscar soluciones.