Desde el año inmediatamente anterior y durante lo corrido de 2009, tropas del Ejército Nacional han neutralizado 17.353 artefactos explosivos y decomisado 118 toneladas de explosivos, mientras que desactivaron 405 campos minados y evitaron 2.377 acciones terroristas.

En un informe presentado por la institución, se explicó que ante la amenaza que generan estos artefactos explosivos improvisados, las tropas han tenido que ser capacitadas en detección y destrucción de dichos elementos.

Dentro de las acciones del Ejército se destaca la localización y neutralización de seis carrobombas, 1.431 cilindros explosivos, 97 mil 174 estopines eléctricos, 239 rampas de lanzamiento, 105 mil 306 metros de cordón detonante y 22 mil 736 metros de mecha lenta.

Pese a que la legislación internacional prohíbe la utilización de artefactos explosivos improvisados, las Farc y el Eln continúan empleando de forma indiscriminada minas y cargas dirigidas, en zonas rurales y urbanas.

Las minas antipersonal son elementos diseñados para asesinar o incapacitar a sus víctimas. Son usadas para frenar el avance de las tropas.

De acuerdo con un informe publicado por el Programa Presidencial para la Acción Integral contra las Minas Antipersonal, entre 1990 y el 1 de noviembre de 2008 se registraron 2.437 víctimas civiles, de las cuales 518 fallecieron y 1.919 resultaron heridas. En su gran mayoría los afectados son hombres y mayores de 71 años.

Según la institución, no cabe duda que a partir de 2007 se disminuyó el número de víctimas. Esto se debe en gran medida a la labor de las tropas del Ejército, que han garantizado el control territorial, obligando a los miembros de los grupos terroristas a desplegarse a zonas selváticas de difícil acceso.