Por lo pronto, además de café, Colombia exportará a China nuevos productos, según lo reseña un informe de la agencia de noticias Xinhua que titula «Un bocado de Colombia: Además del café, vendrán a China también carne de bovino y aguacate»
El reporte hace las siguientes precisiones:
El ministro colombiano de Agricultura, Aurelio Iragorri Valencia, de visita en China estos días, se mueve en Beijing con una agenda muy apretada, conversando con funcionarios y empresarios chinos, visitando mercados de venta mayorista de productos agropecuarios, con el deseo de ver la entrada, cuanto antes, de este tipo de artículos de su país en el mercado chino.
Iragorri dijo a Xinhua en una entrevista el miércoles que el objetivo de su visita a China se enmarca dentro del contexto especial en el que el gobierno de Colombia y las Farc firmaron un acuerdo de paz definitivo hace una semana, y desea aprovechar la oportunidad de paz que se genera en su país para impulsar y profundizar la cooperación agropecuaria entre China y Colombia.
Afirmó que quiere decir a los chinos que Colombia está acogiendo una paz completa, que dará muchas oportunidades de comercio e inversión, y que se da la bienvenida a los chinos interesados en hacer inversiones y turismo en su país.
Desde los años 60 del siglo pasado, el Ejército colombiano y las FARC, la mayor guerrilla del país, desarrollaron una prolongada y sangrienta guerra civil, lo que ha resultado en numerosos muertos, heridos y más de 2,5 millones de desplazados.
El día 23 de junio de 2016, el gobierno colombiano y las FARC firmaron un acuerdo de paz definitivo, que pone fin a un doloroso conflicto bélico que ha afectado negativamente en gran medida al sector agropecuario colombiano.
Iragorri dijo que Colombia se había desangrado durante más de 50 años, en una guerra en la que los campesinos y el sector agropecuario han sido los más damnificados. Los soldados, policías, incluso los miembros de las Farc, son básicamente personas de origen campesino. El conflicto ha causado una grave pobreza, por lo que una vez recuperada la paz en el país, lo más imperioso es desarrollar el sector agropecuario y mejorar el nivel de vida de los colombianos.
Al mismo tiempo, Colombia necesita abrir mercados foráneos para sus productos agropecuarios, y en este sentido, China es una prioridad. En Colombia se cree que la cooperación agrícola entre ambos países, especialmente la apertura del mercado chino a productos agropecuarios colombianos, será el mayor aporte que China puede hacer para consolidar el proceso de paz iniciado en el país andino.
Según el ministro, su visita pretende dar un nuevo impulso a un trabajo iniciado ya hace diez años: lograr que más productos colombianos entren en el mercado chino y, a corto plazo, que lo hagan la carne de bovino y el aguacate Hass.
Según Iragorri, hoy día, en América Latina, el potencial de desarrollo y las oportunidades de inversión que Colombia puede aportar no tienen parangón, porque con el fin del conflicto interno habrá unos 30 millones de hectáreas de tierras de cultivo disponibles para explotar, de los cuales 26 millones están en condiciones de uso inmediato. Esto será una enorme oportunidad para los inversores de otros países, incluyendo los chinos.
El funcionario colombiano indicó que por su ubicación geográfica única, Colombia puede servir de puente que conecte con otros mercados de Norteamérica, América Central, el Caribe y Suramérica. Es uno de los países con una mayor biodiversidad del mundo, con especiales condiciones naturales de tierra, clima, variedades de productos, calidad o rendimiento de la producción, por lo que la cooperación agraria entre Colombia y China posee un enorme potencial.
De acuerdo con las palabras de Iragorri, su país es el segundo exportador de flores frescas del mundo, exporta uno de los mejores cafés del planeta, es el cuarto país proveedor de aguacate Hass a nivel mundial, la carne de bovino colombiana, de buena calidad, ha estado libre de la fiebre aftosa desde hace 20 años. Se ha avanzado en los procesos de admisibilidad, especialmente de la carne de bovino y el aguacate, para su entrada en el mercado chino en un futuro no lejano.
El ministro señaló que China es un país en vías de desarrollo, pero también es una gran potencia, con una población equivalente al total de las de Europa y Estados Unidos, lo que significa un enorme potencial de consumo. Además, en aspectos como el político, el económico o el cultural, China goza de una fuerte proyección. Colombia desea fortalecer aún más su cooperación agrícola con China en las áreas técnica y humana.
Iragorri citó unos datos que le habían proporcionado embajadores de países latinoamericanos en China, que indican que las exportaciones de productos agrarios al país asiático representan casi el 70 por ciento del total vendidos al exterior, para señalar que en el caso de Colombia, con la esperanza y las oportunidades que ofrece la paz, se anhela especialmente poder aprovechar sus ventajas en recursos agropecuarios para abrir el mercado chino, lo que significaría bienestar y prosperidad para los colombianos.
