Sabemos que la pandemia causada por el Covid 19 está afectando la salud mental de los niños y jóvenes. Adaptarse a nuevas rutinas, no poder salir con tranquilidad y prescindir del tapabocas, han sido situaciones desafiantes.
Algunos de los problemas que han comenzado a presentarse durante estos tiempos de pandemia: dificultad para dormir y levantarse, irritabilidad, cambios de apetito, problemas de concentración, no seguimiento de instrucciones, entre otros.
Así mismo, esta situación, sumada a los problemas económicos y las cargas laborales y del hogar han hecho que en los padres aumente el estrés, que es una variable que se correlaciona de forma importante con la presencia de problemas de salud mental infantil.
Sin embargo, el vínculo que se ha forjado con ellos durante este tiempo ha servido para protegerlos, conocerlos y afianzar su confianza.
“Una relación que se caracterice por protección, expectativas realistas con el niño, buenos tratos, fomento de la seguridad y apoyo en la exploración será tierra fértil para que desarrolle todo su potencial y será un paraguas frente a las adversidades”, dice Andrés Lasso, psicólogo clínico de la Fundación Universitaria Konrad Lorenz y experto en psicología clínica infantil.
Y agrega: “Por el contrario, una relación en donde haya violencia se trate al niño como si fuese un adulto en miniatura y no se le acompañe a entender su mundo externo e interno lo dejará mucho más vulnerable al daño de experiencias como la pandemia”.
Siendo así, el experto en psicología clínica infantil da los siguientes consejos para que los padres pongan en práctica con sus hijos frente a esta situación:
1. Fomente una estructura en el hogar, generando rutinas y actividades diarias que permitan saber al niño qué se hace cada día y a qué hora, pero sea flexible y tenga cuidado de no sobre exigir o generar en su hijo una sobrecarga de actividades.
2. Procure tener espacios de esparcimiento y juego con su hijo que involucren actividad física en el hogar y no sean a través de pantallas.
3. Evite la sobrexposición a noticias, si las ve, discútalas con su hijo dejándolo expresar con libertar sus temores y explicándole que van a estar seguros tomando las medidas de cuidado.
4. Permita que su hijo comunique sus emociones, escúchelo y ayúdele a entender las situaciones y lo que siente. No responda a las emociones como algo que eliminar, a veces solo se necesita comunicarlas para que ayuden a entender de dónde vienen y saber escuchar.
5. Favorezca la socialización con otros niños/as y familiares a través de medios virtuales por el momento, pero respete si el niño no desea hacerlo.
6. Supervise el uso de los medios digitales, ya que pueden ser fuente de peligro si se usan de forma controlada.
7. Intente entender cuál puede ser la necesidad de su hijo detrás de ese comportamiento que le parece problemático. Por ejemplo, qué puede haber detrás de esa irritabilidad, qué necesidad está comunicando su hijo con esa conducta.
8. Póngase en los zapatos de su hijo, trate de entender el qué piensa y qué siente. Esto le puede ayudar a entenderlo y no sobre exigirle.
9. Nunca utilice la violencia, siempre corrija a través de los buenos tratos.
Información de: Fundación Universitaria Konrad Lorenz