–A través de la cancillería, el gobierno colombiano rechazó “las desafortunadas palabras expresadas por el señor Presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte” contra el expresidente César Gaviria, a quien llamó “idiota” por desestimar la eficacia de la guerra contra las drogas.
“Me ha dado lecciones a mí, ese idiota”, dijo Duterte en un discurso pronunciado con motivo del 115º aniversario de la creación de la agencia de aduanas, en respuesta a un artículo publicado por Gaviria en ‘The New York Times’ en el que descalifica la guerra sin cuartel contra las drogas y en particular contra los consumidores.
Gaviria señaló que por esta vía no hay forma de ganar y sugiere en cambio, medidas anticorrupción, en particular aquellas contra el blanqueo de dinero, despenalizar el consumo de drogas y regular el de algunas, como las de uso médico y recreativo, e invertir en desarrollo sostenible.
En un comunicado, la cancillería señala:
El Ministerio de Relaciones Exteriores, en nombre del Gobierno de Colombia, manifiesta su rechazo por las desafortunadas palabras expresadas por el señor Presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ante la Oficina de Aduanas, en las que hizo referencia a las recientes opiniones del expresidente César Gaviria en torno a cómo abordar la lucha antidrogas y cómo extraer lecciones de la experiencia de Colombia en esta materia.
Entendemos que las declaraciones del expresidente Gaviria fueron hechas con un espíritu constructivo para que los países que afrontan este flagelo puedan aprender de situaciones vividas por Colombia y avancen en la erradicación de la droga, tanto en el consumo como en el tráfico de esta. El expresidente Gaviria forma parte de la Comisión Global sobre Política de Droga y es reconocido a nivel mundial en esta materia.
A su vez, la Cancillería colombiana rescata las apreciaciones formuladas en el comunicado del 8 de febrero por el portavoz de la Presidencia Filipina, Ernesto Abella, mediante el cual señalan su aprecio por los comentarios y observaciones formulados por el expresidente Gaviria y su respeto por sus opiniones en torno a que la lucha antidrogas no puede ganarse solamente con la participación de las fuerzas armadas, sino como un esfuerzo ampliado de salud pública. Al respecto el portavoz menciona los programas de tratamiento y rehabilitación en funcionamiento en Filipinas para atender la drogadicción.
La Cancillería ha enviado una nota a la Cancillería de Filipinas resaltando la importancia del respeto y lenguaje en el trato entre países y entre sus ciudadanos.