Las autoridades lograron desarticular una banda dedicada al crimen, la venta y expendio de estupefacientes en la localidad de Mártires. De acuerdo con las autoridades, utilizaba perros para ser alertados ante la presencia de la Policía.

La organización criminal estaba compuesta por doce personas, quienes estaban estratégicamente ubicados en el sector donde delinquían y habían tomado en arriendo varias habitaciones en por lo menos cuatro predios de la zona de los Mártires, para vender sus estupefacientes.

También se halló en el sitio una fosa común donde se encontraron restos humanos de una persona. Ante el macabro hallazgo, las autoridades siguen buscando en los inmuebles más restos humanos.

Los uniformados descubrieron toda una logística que funcionaba para la fabricación y empaque de los alucinógenos que luego eran comercializados.

Los seguimientos se iniciaron gracias a las denuncias de la ciudadanía que señalaba que la banda estaba afectado el sector.