Los magistrados Álvaro Valdivieso, José Joaquín Urbano y Jorge Enrique Vallejo, integrantes del Tribunal Superior de Bogotá, que concluyeron que Luis Andrés Colmenares fue asesinado el 31 de octubre de 2010, deberán definir la apelación que presentó la familia del joven muerto en contra de la decisión de la Juez 11 de Conocimiento que absolvió a Laura Milena Moreno y Jessy Mercedes Quintero.
Estos magistrados se declararon impedidos, sin embargo, el tribunal dejó en firme su participación en el caso tras no aceptar la imposibilidad de conocer sobre el caso Colmenares.
El supuesto impedimento se fundamentó en que dentro de la investigación que absolvió a Carlos Cárdenas, los togados declararon que Colmenares fue asesinado. El magistrado José Joaquín Burbano señaló que sí hubo evidencias que demostrarían que el joven no murió de manera accidental, sino de forma violenta, hecho que se aclara por las heridas que registraba el cuerpo de Colmenares.
La juez 11 dijo que: “No existe evidencia científica (de) que hubo desplazamiento y colocación en un sitio para que fuera ubicado en la segunda búsqueda”.
La polémica se abre en el sentido de si estas decisiones contrarias, además de la posición de los magistrados, ponen en riesgo la absolución de las jóvenes Moreno y Quintero por la muerte del joven universitario.
En este caso, el Tribunal Superior de Bogotá tendrá la última palabra, que confirmará o revocará el fallo de primera instancia, que determinó la inocencia de las acusadas en la fallecimiento de Luis Andrés Colmenares.