Consejo de Seguridad de la ONU define respuestas a Corea del Norte por lanzamiento del misil
— El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunirá esta semana para discutir las respuestas ante el último lanzamiento de un misil de Corea del Norte, dijeron los informes de prensa el domingo.
Estados Unidos y Japón solicitaron una sesión urgente sobre el lanzamiento del misil del Norte, y Uruguay, que preside el Consejo de Seguridad este mes, decidió sostener una reunión el martes.
“No hay excusas que justifiquen los actos de Corea del Norte. Fue cerca del territorio nacional de Rusia. China no puede esperar diálogos. Esta amenaza es real”, expresó la embajadora de EE. UU. ante la ONU, Nikki Haley, en un mensaje de Twitter.
Solo en este año el consejo ha adoptado cinco comunicados condenando los lanzamiento de misiles del Norte.
El lanzamiento del misil del Norte realizado el domingo pasado fue considerado como un intento de poner a prueba a la Administración del nuevo presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, ya que tuvo lugar tan solo cuatro días después de que este asumiera el cargo.
CAPAZ DE PORTAR OJIVAS NUCLEAREAS
— Corea del Norte ha dicho este lunes que ha tenido éxito en el lanzamiento de un nuevo misil balístico tierra-tierra de medio y largo alcance, capaz de portar una ojiva nuclear, afirmando que el territorio continental de EE. UU. está a su alcance de tiro.
Corea del Norte dijo que se puede colocar una “ojiva nuclear pesada de gran tamaño” en su nuevo misil tierra-tierra, en su amenaza de lanzar un misil balístico intercontinental (ICBM, según sus siglas en inglés) con ojiva nuclear, capaz de alcanzar el territorio continental estadounidense.
El líder norcoreano observó el lanzamiento del misil, llamado Hwasong-12, el domingo pasado, según la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA).
Corea del Norte lanzó un misil desde un recinto situado al noroeste de Pyongyang, según el Ejército de Corea del Sur, lo que supuso la primera provocación desde que el nuevo presidente surcoreano asumió el cargo el miércoles pasado.
La KCNA afirmó que el misil alcanzó una altitud de 2.111,5 kilómetros, lo que indica que podría tratarse de un nuevo tipo de misil balístico en desarrollo, y añadió que voló 787 kilómetros.
La prueba tuvo como fin verificar las especificaciones tácticas y tecnológicas de un misil balístico recientemente desarrollado, capaz de llevar una ojiva nuclear pesada de gran tamaño, según dijo el reporte en inglés.
Kim advirtió de que EE. UU. no debería calcular mal la realidad de que su territorio continental y sus operaciones en la región del Pacífico están en el “campo de visión de ataque y que cuenta con todos los medios potentes para realizar un ataque de represalia”, añadió.
Si la declaración de Corea del Norte es confirmada, la medida está añadiendo preocupaciones de que Pyongyang podría estar un paso más cerca del desarrollo de un ICBM capaz de atacar el territorio continental de EE. UU.
El líder de Corea del Norte dijo, en su mensaje de Año Nuevo, que el país ha entrado en la etapa final de los preparativos para lanzar un ICBM.
El Ejército surcoreano dijo que se requiere más información para verificar los aspectos técnicos del misil, pero añadió que parece que Pyongyang aún debe perfeccionar su tecnología de misiles para la “reentrada atmosférica”, un elemento clave para el desarrollo de un ICBM.
Según los expertos, las imágenes de los medios de comunicación norcoreanos mostraron lo que parece ser un misil presentado durante el desfile militar organizado por el 105º aniversario del nacimiento del difunto fundador del país y líder norcoreano, Kim Il-sung.
Corea del Norte lanzó un nuevo misil balístico de alcance intermedio, conocido como Pukguksong-2 en Corea del Norte, desde el mismo recinto, el 12 de febrero. Se cree que el misil fue desarrollado con la tecnología utilizada en misiles balísticos de lanzamiento submarino (SLBM).
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur advirtió que Corea del Norte no debe calcular mal la situación.
El portavoz del ministerio, Lee Duk-haeng, dijo, durante una conferencia de prensa regular, que la comunidad internacional concuerda en que las provocaciones nucleares y de misiles del Norte representan una grave amenaza a la paz y seguridad de la región y del mundo.
Lee rehusó declarar la opinión gubernamental sobre la intención del Norte, indicando la necesidad de tomar en cuenta factores relacionados con las relaciones intercoreanas, incluida la organización de un posible diálogo.
Los expertos dijeron que el lanzamiento parece tener como fin poner a prueba al nuevo presidente de Corea del Sur, quien ha prometido impulsar un acercamiento de doble vía de promover la desnuclearización y el diálogo con Pyongyang.
Se cree, de forma generalizada, que Moon buscará el compromiso con Corea del Norte para mejorar los lazos dañados durante mucho tiempo, pero los programas nucleares y de misiles de Pyongyang están limitando su margen para políticas reconciliadoras.
El domingo pasado, el presidente dijo que su Administración hará frente de forma resuelta a las provocaciones norcoreanas, a fin de asegurarse de que Pyongyang no “calcule mal” la situación.
Las tensiones se elevaron en la península coreana en las últimas semanas, en medio de las especulaciones de que Corea del Norte podría realizar su sexto ensayo nuclear.
Pyongyang parecía abstenerse de llevar a cabo provocaciones a gran escala, pero el último lanzamiento podría poner a prueba la política de Seúl y Washington sobre el régimen norcoreano.
Choe Son-hui, una diplomática de alto rango norcoreana, dijo, el sábado pasado, que Pyongyang desea conversar con Washington “bajo las condiciones adecuadas”.
EE. UU. dijo que tratará de presionar a Corea del Norte para desmantelar sus programas nucleares y de misiles mediante sanciones, mientras que permanece abierto al diálogo. El presidente de EE. UU., Donald Trump, está presionando a China para controlar a su vecino impredecible. (Información de la Agencia Yonhap)