Con los 104 árboles que se sembrarán en el centro de Bogotá, aumentará en un 35 por ciento la zona de arbolado que actualmente tiene este sector de la ciudad.

Estos árboles reemplazarán a los que estaban a lo largo de la carrera 7a., entre calles 19 y 26. Especies que se encontraban en mal estado físico y sanitario y que estaban poniendo en riesgo a la comunidad.

De hecho, 25 árboles fueron trasladados y 33 de estos se conservaron al no representar ningún peligro para las personas. Además, son especies ideales para el espacio público.

Con esta intervención se busca mejorar las condiciones ambientales del centro histórico de Bogotá y reducir el nivel de riesgo asociado a árboles enfermos.

Señales para detectar un árbol en riesgo:

– Que tenga ramas grandes, secas o muertas en el árbol.

– Ramas desgarradas colgadas en el árbol.

– Tiene cavidades, hongos o pudrición en el tronco o las ramas.

– Zonas de madera podrida en el tronco o ramas principales.

– Presenta grietas y rajaduras en el tronco.

– Troncos con inclinación marcada.

– Presenta daños por causa de un choque.

– Hay encharcamientos permanentes en la base del árbol.

– Hay árboles caídos o muertos alrededor.

– Se observa presencia de roedores en la base del árbol.

– Hay daño en las raíces generada por obras de infraestructura.

– Si además el árbol está ubicado sobre vía principal o infraestructura.

– Raíces descubiertas con levantamiento del suelo o en procesos de descomposición.