La ONU confirmó que la nueva misión política en Colombia para verificar la reintegración en la sociedad de los exguerrilleros de las Farc comenzará a operar el 26 de septiembre.
Así lo señaló el representante de la ONU en Colombia, Jean Arnault, en una reunión del Consejo de Seguridad para analizar los pasos para que comience a funcionar esta misión, que fue creada el 10 de julio pasado.
La Misión de Verificación de la ONU en Colombia, de carácter civil, recoge el relevo de otra misión anterior encargada de verificar la aplicación de los acuerdos de paz firmados en 2016 entre Colombia y las Farc.
El mandato de la segunda misión será el de asegurar la implementación del acuerdo de paz en lo relativo a la reintegración política, económica y social de las Farc, así como asegurar que se garantice la seguridad de los exguerrilleros.
Arnault dijo al consejo que está existiendo una “transición suave” entre las dos misiones de Naciones Unidas, la anterior y la actual, y esta última “está en camino de comenzar su verificación a tiempo. “Está en posición para iniciar su mandato desde el primer día”, insistió.
Asimismo, Arnault se refirió al anuncio hecho el pasado 4 de septiembre entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional para observar un cese al fuego desde el 1 de octubre próximo y hasta el 12 de enero de 2018.
El representante de la ONU expresó la disposición de la ONU para asistir a las partes en la verificación de los acuerdos adoptados en ese compromiso, y dijo que ya hay miembros de la misión de la ONU analizando aspectos técnicos del proceso.
Para el representante permanente de Bolivia en Naciones Unidas, Sacha Llorenti, tanto el Consejo de Seguridad como la comunidad internacional han sido testigos “de los avances extraordinarios en el proceso de paz en Colombia” y por eso manifestó que la nueva misión tendrá a su cargo una parte complicada del proceso sobre todo si se tiene en cuenta que “alcanzar una paz sostenible dependerá de la reincorporación de las Farc”.
El delegado de Bolivia resaltó además el papel fundamental que han jugado las víctimas en el caso colombiano al señalar que “hacen de este proceso un ejemplo para todo el mundo”. Y añadió: “hay que hacer un homenaje al trabajo de la misión de la ONU en Colombia, el mecanismo tripartito ha sido un instrumento fundamental para mantener y fortalecer la confianza, puede servir de modelo en la resolución de conflictos en otras partes del mundo”.
A su turno Vasili Nebenzia, representante permanente de Rusia ante al ONU, manifestó que “hoy es uno de esos días muy raros en donde vemos que tras una aprobación de una resolución hay avances positivos” y aseguró que el Consejo acoge el proceso de paz y la conclusión de la dejación de las armas, pues se trata de una paso fundamental que abre las puertas “para transformar a las Farc en una fuerza política para que se puedan cumplir las tareas pendientes”.
Por su parte, la embajadora de Colombia ante la ONU, María Emma Mejía, agradeció a Naciones Unidas el apoyo que siempre han brindado al proceso de paz colombiano: “ustedes le apostaron a la paz en Colombia mucho antes de que firmaramos el acuerdo y eso le dio un impulso importante al proceso de paz que logró el acuerdo final y nos permitió avanzar hacia la implementación de los acuerdos sobre la reincorporación de las Farc”.