El Gobierno Nacional señaló este viernes que el asesinato de un líder indígena en octubre pasado por parte de la guerrilla del ELN “constituye una clara violación al acuerdo de cese al fuego” vigente entre las partes desde el 1 de ese mes.
Con esto, la Oficina del Alto Comisionado para la Paz solicitó en un comunicado al “frente de guerra occidental Omar Gómez” que “demuestre su voluntad de paz” y envíe “de manera inmediata” uno de sus delegados a la mesa de diálogos en Quito.
Y le solicitó además a ese frente que “cese ya todo accionar contra la población civil del departamento de Chocó”, fronterizo con Panamá.
El organismo señaló que: “Este asesinato constituye una clara violación al acuerdo de cese al fuego acordado el 4 de septiembre en Quito Ecuador, tal y como quedó registrado por el Mecanismo de Veeduría y Verificación de Naciones Unidas”.
Este pronunciamiento se pronunció después de que el Instituto de Medicina Legal hallara evidencias de que el cuerpo del gobernador indígena Aulio Isarama Forastero presentaba “un disparo a contacto firme en un tórax desnudo”, que consideró “una evidencia científica de un estado de indefensión”.
El 29 de octubre pasado, el ELN reconoció en un comunicado su responsabilidad en el asesinato del gobernador indígena, ocurrido en una zona rural del departamento de Chocó.
Esta guerrilla señaló en ese entonces que Isarama, líder del resguardo indígena Catru Dubaza Ancoso, del municipio del Alto Baudó, tendría relación con “inteligencia militar”, por lo que decidieron abordarlo para “interrogarlo”.
Y también indicó que cuando era conducido al interrogatorio el líder indígena se negó a caminar y se abalanzó sobre uno de los guerrilleros “con el trágico desenlace conocido”.
“El comunicado difundido por la dirección del Frente de Guerra Occidental Ómar Gómez del ELN, publicado el 29 de octubre, faltó a la veracidad”, señaló la Oficina del Alto Comisionado, al recordar la versión del grupo guerrillero.
La Oficina hizo un llamado al ELN “a poner en práctica lo acordado en el cese al fuego”, al señalar que representan “elementos fundamentales para continuar de manera exitosa que permitan llevar bienestar a las comunidades más afectadas por el conflicto armado”.
El jefe de la delegación del Gobierno en los diálogos con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), Juan Camilo Restrepo, declaró el pasado 3 de noviembre, que estaba satisfecho, “en líneas generales”, por el cumplimiento del cese al fuego y de hostilidades en el primer mes de vigencia, en un comunicado difundido en Quito.
Y agregó que hechos como el “condenable homicidio del gobernador indígena, cuya autoría reconoció el Frente de Guerra Occidental, no se pueden volver a registrar”.