La Comisión Europea adoptó una nueva Estrategia sobre Adaptación al Cambio Climático, que establece el camino para prepararse para los inevitables impactos del cambio climático. Si bien la UE hace todo lo que está a su alcance para mitigar el cambio climático, a nivel nacional e internacional, también debemos prepararnos para enfrentar sus inevitables consecuencias.

Desde olas de calor mortales y sequías devastadoras hasta bosques diezmados y costas erosionadas por el aumento del nivel del mar, el cambio climático ya está pasando factura en Europa y en todo el mundo. Sobre la base de la Estrategia de Adaptación al Cambio Climático de 2013, el objetivo de las propuestas de hoy es cambiar el enfoque de la comprensión del problema al desarrollo de soluciones y pasar de la planificación a la implementación.

El vicepresidente ejecutivo del Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans, dijo: “La pandemia de COVID-19 ha sido un duro recordatorio de que una preparación insuficiente puede tener consecuencias nefastas. No existe una vacuna contra la crisis climática, pero aún podemos combatirla y prepararnos para sus efectos inevitables. Los impactos del cambio climático ya se sienten tanto dentro como fuera de la Unión Europea. La nueva estrategia de adaptación climática nos equipa para acelerar y profundizar los preparativos. Si nos preparamos hoy, todavía podemos construir un mañana resistente al clima ”.

Las pérdidas económicas causadas por fenómenos meteorológicos extremos más frecuentes relacionados con el clima están aumentando. En la UE, estas pérdidas por sí solas ya promedian más de 12 000 millones de euros al año. Las estimaciones conservadoras muestran que exponer la economía de la UE actual a un calentamiento global de 3 ° C por encima de los niveles preindustriales daría lugar a una pérdida anual de al menos 170 000 millones de euros. El cambio climático afecta no solo a la economía, sino también a la salud y el bienestar de los europeos, que sufren cada vez más olas de calor; El desastre natural más mortífero de 2019 en todo el mundo fue la ola de calor europea, con 2500 muertes.

Nuestra acción sobre la adaptación al cambio climático debe involucrar a todas las partes de la sociedad y todos los niveles de gobernanza, dentro y fuera de la UE. Trabajaremos para construir una sociedad resiliente al clima mejorando el conocimiento de los impactos climáticos y las soluciones de adaptación; intensificando la planificación de la adaptación y las evaluaciones de riesgos climáticos; acelerando la acción de adaptación; y ayudando a fortalecer la resiliencia climática a nivel mundial.

Adaptación más inteligente, más rápida y más sistémica

Las acciones de adaptación deben basarse en datos sólidos y herramientas de evaluación de riesgos que estén disponibles para todos, desde familias que compran, construyen y renuevan viviendas hasta negocios en regiones costeras o agricultores que planifican sus cultivos. Para lograrlo, la estrategia propone acciones que traspasen las fronteras del conocimiento sobre adaptación para que podamos recopilar más y mejores datos sobre los riesgos y pérdidas relacionados con el clima, poniéndolos a disposición de todos. Se mejorará y ampliará Climate-ADAPT, la plataforma europea para el conocimiento de la adaptación, y se agregará un observatorio de salud dedicado para rastrear, analizar y prevenir mejor los impactos del cambio climático en la salud.