Al parecer los uniformados le exigieron 60 millones de pesos a un civil para no involucrarlo con un caso de estupefacientes en el que estaría vinculado su vehículo.
Según lo informó la Fiscalía, se trata de el patrullero Ángel Fabián Poveda Walteros y el intendente Faustino Alexánder Castañeda Angulo, adscritos al CAI Versalles en la localidad de Fontibón, y quienes fueron asegurados con detención domiciliaria por el delito de concusión.
Los hechos ocurrieron el 28 de julio de 2018, cuando los dos uniformados interceptaron a la víctima en vía pública y, tras solicitarle la documentación del vehículo en el que se transportaba, le exigieron 60 millones de pesos, manifestándole que el automotor tenía un problema y estaba vinculado en una caso por tráfico de estupefacientes.
La víctima les entregó 10 millones de pesos, pero los policiales al parecer le pidieron 5 millones más, y como no pudo reunirlos, los hoy procesados le habrían exigido que les hiciera el traspaso del vehículo.
El caso fue conocido por un fiscal de la URI de Engativá, que con apoyo del CTI logró las capturas de los investigados el pasado 19 de septiembre, en la Estación de Fontibón.
En audiencias concentradas, realizadas ante el Juzgado 36 Penal Municipal con función de control de garantías, los uniformados no aceptaron su responsabilidad.