–La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca, CAR, disparó las alarmas por el aumento irregular de talas masivas detectadas en los últimos meses, por posibles malas prácticas y utilización indebida de permisos de árboles en riesgo inminente, por parte de algunos comerciantes de madera.

En varias visitas técnicas, la corporación evidenció que madereros están exhibiendo este tipo de permisos, que utilizan no solo para el aprovechamiento irregular, sino para movilizar madera, evitando el cumplimiento de los requisitos legales, entre ellos que tales autorizaciones se emitan por parte de la autoridad competente. Ya hay identificados algunos casos, los cuales a la fecha son objeto de verificación para que, de ser confirmadas las irregularidades, se inicien los procedimientos sancionatorios correspondientes.
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La figura de árboles en riesgo fue adoptada por la CAR, mediante acuerdo 21 de 2018, artículo 51 – Riesgo Inminente, que a su vez se basa en la ley 1523 de 2012, por la cual se adopta la Política Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres y se establece el Sistema Nacional de Gestión del riesgo. Sin embargo, algunas personas se han ingeniado la manera para obtener permisos irregulares con esta figura, haciendo el aprovechamiento de la madera sin ningún tipo de compensación y donde en realidad no hay riesgo alguno.
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En atención a lo anterior y con el objeto de generar acciones preventivas, la Dirección Regional Sabana Occidente de la CAR convocó de manera urgente a los alcaldes, jefes de planeación y encargados del tema ambiental en los municipios de la regional, para capacitarlos sobre este tema y aclarar en qué casos y bajo qué conceptos se debe utilizar esta figura, de manera que cuando se emita un concepto de árboles en riesgo, sea porque hay plena garantía de que verdaderamente lo están.

En esta reunión estuvo presente la Procuradora Judicial Ambiental y Agraria delegada para Sabana Occidente, Ruth Mireya Núñez, quien pidió a los municipios mayor responsabilidad en la designación de personal idóneo para emitir dichos conceptos y anunció investigaciones disciplinarias donde hubiere lugar a ello.

La CAR por su parte reforzará los mecanismos técnicos y jurídicos, extremando y aumentando los controles a la hora de emitir este tipo de permisos de aprovechamiento. Además está alerta verificando que en otras zonas del territorio no se esté presentando esta misma práctica irregular.
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“No seguiremos permitiendo que se nos convierta en “tramitadores exprés” de ciertos madereros que buscan un lucro, sin importar la afectación ambiental que se pueda generar o el incumplimiento a los procedimientos y normas ambientales que se pueda configurar. Por eso la invitación es a que trabajemos unidos y antes de emitir un concepto o un permiso, verifiquemos competencias, y en todo caso, nos apoyemos con los profesionales de la CAR, quienes con gusto les asesorarán para, no solo frenar esta práctica, sino evitarse problemas disciplinarios y hasta penales”, dijo Carlos Eduardo Rodríguez Suárez, Director Regional Sabana Occidente de la CAR.

La Corporación reitera que no está en contra de la actividad de la comercialización de madera, pero esta debe hacerse cumpliendo con la ley y las normas ambientales que exige, no solo la autoridad ambiental, sino también el ICA en el caso de la movilización.