Autoridades sanitarias del estado de Indiana, Estados Unidos, reportaron la muerte de una tercera persona que usaba cigarrillos electrónicos. Las otras dos muertes ocurrieron en Illinois y Oregon.
Centenares de vapeadores, incluidos los que usan recargas de marihuana vendida en el mercado negro, han sufrido graves enfermedades pulmonares en todo el país y han tenido que ser ingresados en hospitales.
El estado de Nueva York sospecha que un aditivo que contiene vitamina E es la causa de las enfermedades, pero las autoridades federales de salud no han confirmado que esté involucrada una sola sustancia, a la espera de conclusiones claras de análisis de laboratorio.
Tras un recuento la semana pasada, las autoridades federales indicaron que 215 personas padecían enfermedades pulmonares relacionadas con el vapeo.
“Aunque no sabemos qué sustancias son dañinas, tenga en cuenta que cuando usa estos productos con otros productos químicos, no sabe todo lo que inhala y el daño que puede causar”, dijo Kris Box, responsable de salud pública en Indiana.
Esta misma semana, el estado de Michigan, en el noreste estadounidense, anunció la prohibición de las recargas aromatizadas para cigarrillos electrónicos para evitar el vapeo en los jóvenes, lo que le convierte en el primero en adoptar esta decisión.
“Como gobernador, mi prioridad número uno es proteger a nuestros jóvenes”, dijo el gobernador Gretchen Whitmer. “Los vendedores de vaporizadores usan perfumes de sabores para acostumbrar a los jóvenes a la nicotina y el marketing engañoso para hacerles creer que estos productos no son peligrosos”.
La decisión entrará en vigor en unas pocas semanas, una vez que se termine de redactar el texto, y tendrá una validez de seis meses, con opción de renovación.
Así, la venta de recargas y líquidos con nicotina saborizada estarán prohibidas en comercio y en línea en todo Michigan. El estado también prohibirá cualquier comercialización que presente el vapeo como “limpio”, “seguro” y “saludable”.
Las piezas publicitarias para cigarrillos electrónicos también estarán prohibidas. El éxito de los cigarrillos electrónicos en Estados Unidos en los últimos años, y especialmente la marca Juul entre los jóvenes, ha provocado una reacción tardía pero cada vez más severa por parte de las autoridades sanitarias a nivel federal, pero también a nivel local en los estados.
La administración Trump lanzó investigaciones sobre Juul, con sede en San Francisco, y anunció el año pasado la próxima prohibición de la venta por internet de recargas con sabores a caramelos, que atraen a los más jóvenes.
Bajo presión, Juul ha tomado medidas para evitar la venta de sus productos a menores tanto en línea como a sus distribuidores.