Los miembros de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional son el otro frente de batalla contra el covid-19 ya que exponen su salud y vida diariamente para mantener el orden social, uno de los aspectos vitales en la actual fase de la emergencia sanitaria y en el que todos los ciudadanos deben colaborar.

«Las Fuerzas Militares y la Policía Nacional están expuestos a varios riesgos por cuidarnos. Desde el inicio de la epidemia han estado realizando acciones, protegiendo a los colombianos y producto de esa protección tienen mayores riesgos», dijo Luis Alexander Moscoso Osorio, viceministro de Salud Pública y Prestación de Servicios.

Desde que inició la emergencia sanitaria y hasta el 30 de junio, entre el personal activo de las Fuerzas Militares (Ejército Nacional, Armada de Colombia y Fuerza Aérea Colombiana) se han registrado 3.045 casos de covid-19 y 2 fallecimientos, mientras que en la Policía Nacional se han presentado 2.656 casos de covid-19 y 9 fallecimientos.

«Nuestros militares y policías arriesgan todos los días sus vidas en pro de cuidar a la población civil», indicó el viceministro Moscoso, insistiendo en un llamado a la ciudadanía para que se entienda el compromiso que tienen las Fuerzas Militares y la Policía Nacional ante la actual emergencia sanitaria.

Igualmente agradeció la labor de la Fuerza Pública en el marco de la emergencia sanitaria, no solo en el cumplimiento de su misión institucional, sino también por el apoyo que han brindado a los colombianos durante este periodo.

En el mismo sentido, el viceministro ratificó la disposición del Ministerio de Salud y Protección Social de seguir trabajando en conjunto con el Sector Defensa en la aplicación de los lineamientos de prevención del covid-19 y atención de casos confirmados.

Por último, se reiteró que medidas como apoyo al cumplimiento del distanciamiento físico de dos metros, evitar aglomeraciones y asistencia a lugares de gran afluencia, además de estrategias de capacitación y promoción individuales como lo son el lavado de manos o desinfección permanente con agua y jabón o alcohol glicerinado, uso correcto de tapabocas y evitar saludos de manos, deben seguir siendo aplicadas para prevenir la propagación del covid-19, tanto en el servicio activo de los uniformados como por fuera del mismo.