Presidente Duque: Sanciones por graves delitos deben ser proporcionales, efectivas y no revictimizantes
–En un pronunciamiento en clara referencia al juicio iniciado este jueves por la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, a los máximos cabecillas de las desaparecidas Farc por secuestro y otros crímenes de lesa humanidad, el presidente Iván Duque reiteró que no debe haber impunidad y que las sanciones por graves delitos deben ser proporcionales, efectivas y no victimizantes.
“Si bien vemos que se adelantan imputaciones por el delito de secuestro a quienes ejercieron el mando superior de grupos terroristas, también es importante, y es lo que está a prueba, que esas sanciones sean proporcionales y sean efectivas y que no traigan la revictimización de quienes fueron flagelados porque quienes cometieron esos crímenes no tengan esa sanción”, aseveró el Jefe de Estado en el XV Encuentro de la Jurisdicción Constitucional.
Duque aseguró que quienes cometan crímenes de lesa humanidad no solamente deben tener sanciones ejemplarizantes y proporcionales, sino que también no estén revestidos de honores y, por el contrario, también la sanción colectiva implique que ellos no tengan derechos por encima de los demás ciudadanos”.
Evocando tratados como el Estatuto de Roma, el jefe del Estsado señaló que se debe tener presente que “la proporcionalidad de la pena es un deber indeclinable de nuestro país”.
Expresó que en la historia política del país, cuando se han desarrollado procesos, tras largas confrontaciones, “ha estado siempre el halo y el hilo conductor de la impunidad, donde no hay sanciones proporcionales a quienes han cometido los más brutales crímenes” y añadió que las excepciones han sido contadas.
Así mismo, manifestó que en aras de la equidad y la igualdad de derechos, “no podemos tener en Colombia un doble rasero, donde ciudadanos que cometan delitos, cualquiera, no puedan nunca jamás presentarse a aspirar a ser congresistas y otros ostenten sus curules con condenas por crímenes de lesa humanidad”.
Hizo énfasis, por último, en que “quienes cometan crímenes de lesa humanidad no solamente tengan sanciones ejemplarizantes y proporcionales, sino que también no estén revestidos de honores y, por el contrario, la sanción colectiva implique que no tengan derechos por encima de los demás ciudadanos”.