Economía

Banco de la República prevé descenso de la inflación en segundo semestre y un crecimiento económico de 1,0% para 2023-2024

–Un descenso de la inflación a partir del segundo trimestre de este año, debido a aumentos cada vez más pequeños en los precios de los alimento, pronostica el Banco de la República. Igualmente prevé un crecimiento económico del país tanto para 2023 como para 2024 del 1,0%

Según el «Informe de Política Monetaria» publicado este miércoles por el Emisor, las menores presiones cambiarias esperadas y unos costos y precios internacionales que se seguirían moderando contribuirían a la desaceleración anual del índice de precios al consumidor (IPC) de bienes. A esto se suman condiciones financieras internas y externas más apretadas, las cuales contribuirían a reducir los excesos de demanda en el horizonte de pronóstico y a bajar la inflación.

La inflación habría alcanzado su máximo en marzo y empezaría a caer gradualmente a partir del segundo trimestre de 2023 hacia la meta del 3% en los siguientes dos años, precissa el documento.

Con todo esto, advierte, al final de 2023 la inflación total y la básica sin alimentos ni regulados (SAR) se situarían alrededor del 9,5% y 8,9%, respectivamente, y a diciembre de 2024 se alcanzarían valores cercanos al 3,4% y 3,9%.

Sin embargo, señala que estos pronósticos tienen una incertidumbre elevada, relacionada especialmente con: el comportamiento futuro de las condiciones financieras internacionales, la depreciación del peso, el ritmo de ajuste de la demanda interna, el grado de indexación de los contratos nominales y las decisiones que se tomen en cuanto al precio interno de los combustibles y de la energía eléctrica.

Según el Emisor, la economía mantendría los altos niveles de actividad ya alcanzados, pero con crecimientos bajos, los cuales permitirían reducir la inflación.

Añade que en 2023 la actividad económica continuaría desacelerándose, convergiendo a niveles más compatibles con la capacidad productiva de la economía. Esto contribuiría a reducir las presiones de demanda sobre los precios.

Precisa que el crecimiento económico observado a finales de 2022, junto con los indicadores de actividad económica para comienzos de este año, sugieren que la economía se habría continuado desacelerando, debido a una menor dinámica de la demanda interna. No obstante, los excesos de demanda estimados siguen siendo importantes, reflejados en un nivel del producto que supera la capacidad productiva sostenible de la economía y en un elevado déficit de la cuenta corriente.

Con respecto a la inflación, en el primer trimestre continuaron diluyéndose los choques de oferta externos e internos que habían presionado al alza los precios y los costos de producción

En cuanto a la inflación mundial, el Banco de la República indica que en 2023 se reduciría, aunque se mantendría por encima de la meta de la mayoría de los bancos centrales.