Internacional

La ONU advierte de una «catástrofe inminente» en Oriente Medio; Hezbolá lanza 150 cohetes, misiles y drones hacia Israel

–(Foto @Israel). La coordinadora especial de las Naciones Unidas para el Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert, advirtió este domingo de una «catástrofe inminente» en Oriente Medio, en medio de la escalada de tensiones entre Israel y el grupo chiita Hezbolá.

«Con la región al borde de una catástrofe inminente, no se puede exagerar: NO hay ninguna solución militar que haga que ambas partes estén más seguras», comunicó la funcionaria.

Mientras tanto, el ejército israelí dijo que habían disparado cohetes «hacia áreas civiles». «Si Hezbolá no entiende el mensaje, les aseguro que lo entenderá», advirtió el primer ministro Benjamin Netanyahu.

Por su parte, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, aseguró que Hezbolá está empezando a sentir los efectos de las «capacidades» del Ejército israelí, en referencia a los últimos ataques contra el movimiento chiita libanés, informó The Times of Israel.

«Estos movimientos continuarán hasta que lleguemos a una situación en la que podamos devolver a salvo a los residentes del norte a sus hogares», indicó Gallant, quien agregó que harán «todo lo necesario» para cumplirlo.

Mientras tanto, el movimiento libanés Hezbolá lanzó unos «150 cohetes, misiles de crucero y drones» en una zona más amplia y profunda del norte de Israel este domingo, algunos de los cuales cayeron cerca de la ciudad de Haifa, indicó el ejército israelí.

El ataque hizo que miles de personas se dirigieran a refugios. El ejército israelí dijo que se habían disparado cohetes «hacia áreas civiles», lo que apunta a una posible escalada después de que los bombardeos anteriores se habían dirigido principalmente a objetivos militares.


Hezbolá afirmó que atacó dos veces la base y aeropuerto de Ramat David, a unos 45 kilómetros de la frontera, con «docenas» de cohetes Fadi-1 y Fadi-2 «en respuesta a los repetidos ataques israelíes dirigidos contra diferentes regiones libanesas y que han causado la muerte de muchos civiles».

El bombardeo se produjo después de un ataque aéreo israelí en Beirut el viernes que mató al menos a 45 personas, incluyendo dos líderes de Hezbolá, así como mujeres y niños.

«Los ataques del ejército continuarán y se intensificarán», advirtieron las fuerzas israelíes en un comunicado este domingo.

Hezbolá ya se estaba recuperando de un sofisticado ataque que provocó la explosión de miles de bíperes y walkie-talkies apenas unos días antes.

«En los últimos días, hemos asestado una serie de golpes a Hezbolá que nunca habría imaginado. Si Hezbolá no entiende el mensaje, les aseguro que lo entenderá», declaró este domingo el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu en un comunicado, en el que agregó que Israel «no tolerará ataques contra sus habitantes y ciudades».

El número de muertos por un ataque aéreo israelí en un suburbio de Beirut aumentó a 31, entre ellos siete mujeres y tres niños, informó el sábado el ministro de Salud del Líbano.

Firass Abiad dijo a los periodistas que 68 personas también resultaron heridas, de las cuales 15 permanecen en el hospital, y agregó que las operaciones de búsqueda y rescate aún estaban en curso y que es probable que el número de víctimas aumente.

El inusual ataque —el más mortífero dirigido a la capital libanesa desde la guerra entre Israel y el grupo político-paramilitar Hezbolá de 2006— impactó a un barrio del sur densamente poblado el viernes por la tarde durante la hora pico, cuando la gente regresaba a sus hogares.

Israel dijo que mató a 11 agentes de Hezbolá, incluido Ibrahim Akil, que estaba a cargo de la Fuerza Radwan de elite del grupo. Un grupo de militantes del grupo se encontraban reunidos en el sótano del edificio que fue destruido.

Hezbolá anunció durante la noche del viernes que 15 de sus miembros murieron en operativos de las fuerzas israelíes, pero no ofreció más detalles sobre el lugar de estas muertes. (Información RT, DW y VOA).