–(Foto @LaCasaBlanca). Hoy 5 de noviembre en EE.UU. se celebran las elecciones presidenciales en las que se enfrentan Donald Trump, candidato republicano y expresidente del país, y Kamala Harris, la actual vicepresidenta del país y candidata demócrata.
El resultado de los comicios definirá quién será el mandatario del país norteamericano durante los próximos cuatro años. Tanto Trump como Harris han hecho varias propuestas en torno a las cuestiones clave como la economía y la política exterior, entre otras.
La economía
Regulación de precios
De acuerdo con el programa oficial de Kamala Harris y su candidato para la vicepresidencia, Tim Walz, su objetivo principal es bajar precios y crear una “economía de oportunidades”. Esto incluye, entre otras cosas, la regulación de precios para productos alimenticios e inversiones en pequeñas empresas para fomentar “crecimiento, innovación y puestos de trabajo” y luchar “por devolver el dinero a los estadounidenses trabajadores y de clase media” en vez de arremeter contra “los multimillonarios y las grandes corporaciones”.
En este sentido, también planea pedir al Congreso que apruebe “la primera prohibición federal de los precios abusivos”. Así, el proyecto de ley establecerá normas que impidan a las grandes empresas aprovecharse injustamente de los consumidores en tiempos de crisis “para obtener beneficios excesivos en alimentos y comestibles”.
En este sentido, a mediados de agosto, la candidata demócrata anunció que luchará por reducir impuestos para los “trabajadores” y perseguir a las empresas que inflan los precios. “Mi principal prioridad es reducir los altos costes donde importan más, en el coste de los alimentos”, dijo en aquel entonces, durante su mitin de campaña en Carolina del Norte, describiendo su política económica que priorizaría en sus primeros 100 días en la Casa Blanca si es elegida como presidenta del país.
Protección financiera e impuestos
A su vez, una de las propuestas principales de Donald Trump es la implementación de tarifas de entre el 10 y el 20 % para productos de importación, y para los artículos de fabricación china se prevé que las tarifas puedan aumentar hasta el 60 %. “Es para proteger empresas que tenemos aquí [en EE.UU.] y nuevas compañías que se instalen aquí”, aseguró el candidato republicano. Además, si es elegido, Trump planea prorrogar las exenciones fiscales promulgadas en 2017 y recortar del 21 al 15 % el tipo impositivo para las empresas que fabriquen sus productos en EE.UU., con el objetivo de dar un impulso a la industria estadounidense.
Además, Trump prometió no aumentar la edad de jubilación en caso de ser elegido, abolir la doble imposición para los ciudadanos estadounidenses que viven en el extranjero y eliminar impuestos sobre las propinas. La última medida también figura entre las promesas de la campaña de Harris, y no es la única coincidencia. Así, el candidato a vicepresidencia de Trump, James David Vance, mencionó un posible aumento de la deducción fiscal por hijos de los 2.000 dólares actuales a 5.000 dólares. Aunque cabe destacar que Harris no solamente propone aumentar la misma cuantía a 6.000 dólares, sino también construir tres millones de nuevas viviendas, y proporcionar hasta 25.000 dólares de ayuda al pago inicial a su primera casa.
Cuestión fronteriza
El tema de la crisis migratoria ha sido uno de los temas clave en el debate presidencial entre los dos candidatos celebrado a principios de septiembre. En el programa de Trump, ocupan un lugar central la inmigración y la seguridad fronteriza, por lo que el exmandatario tiene previsto terminar el proyecto del muro fronterizo entre EE.UU. y México, que no ha sido cancelado totalmente por el presidente actual, Joe Biden, pese a haberlo criticado. Además, durante el debate, Trump sugirió reactivar las restricciones de asilo y el programa ‘Quédate en México’, además de realizar la mayor operación de deportación interna de inmigrantes ilegales y poner fin a la ciudadanía por derecho de nacimiento.
A mediados de octubre, Trump también propuso la pena capital para inmigrantes que asesinen a ciudadanos de EE.UU. “Por la presente pido la pena de muerte para cualquier migrante que mate a un ciudadano estadounidense o a un agente de la ley”, anunció Trump. En el mismo contexto, Trump prometió cerrar la frontera el primer día de su posible presidencia. “Detendré la invasión de ilegales a nuestro país. Y comenzaremos la mayor operación de deportación en la historia de los EE.UU.”, aseguró.
Por su parte, Harris apoya el rumbo de la Administración Biden, arremetiendo contra los republicanos por rechazar un proyecto de ley que endurecería las normas de asilo y aplicaría otras restricciones a la inmigración, mientras aumentaría los recursos para mejorar las vías de inmigración legal. Al mismo tiempo, prometió centrarse en elaborar una legislación fronteriza integral que pueda restringir la migración a EE.UU. y expandir las posibilidades de obtener la ciudadanía estadounidense en caso de no tener problemas con las leyes del país.
Política exterior
Oriente Medio
En lo relacionado con la guerra en la Franja de Gaza, ambos candidatos resaltan el derecho de Israel a defenderse y a perseguir a Hamás, pero Trump instó a resolver el conflicto lo antes posible y enfatizó que el ataque del 7 de octubre del año pasado nunca habría ocurrido si él hubiera sido presidente.
Si bien Harris coincide con Trump en cuanto a la cuestión de la proporción de ayuda militar al país hebreo, al mismo tiempo, subraya la crisis humanitaria en Gaza y el derecho de palestinos a “dignidad, seguridad y libertad”. En este sentido, a finales de octubre, Trump dijo al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, que debería poner fin a la guerra en el enclave palestino “cuando [el exmandatario estadounidense] vuelva a la Casa Blanca”.
Crisis ucraniana
En cuanto al conflicto ucraniano, Trump criticó en varias ocasiones la ayuda militar proporcionada a Kiev, por lo que prometió reducir su volumen y respaldó la idea de ayuda adicional en forma de “préstamo” en lugar de “regalo”. Además, afirmó que en caso de ganar los comicios, conseguirá en 24 horas un acuerdo de paz en Ucrania, ya que asegura tener una buena relación con los líderes de ambos países.
Entretanto, la actual vicepresidenta del país insiste en la necesidad de armar a Ucrania y de recabar apoyo europeo e internacional para Kiev. Asimismo, opina que no se puede tratar sobre las concesiones territoriales por parte de Ucrania como condiciones de posibles negociaciones de paz entre ambas partes del conflicto.
Las posturas sobre el papel que debe jugar Washington en la OTAN también difieren: mientras Harris comparte la opinión de Biden, que considera la ampliación de la Alianza como uno de sus logros principales, Trump ha criticado al bloque militar en numerosas ocasiones. Durante su mandato, llegó a advertir a los países de la OTAN que Washington no los protegería de un eventual ataque si no cumplían sus obligaciones financieras con la Alianza. Además, considera que la OTAN no acudiría en ayuda de EE.UU. en caso de ataque, por lo que el gasto de Washington en la Alianza no está justificado.
Abortos
La salud de la mujer es uno de los temas que sacude al espacio informativo estadounidense. Harris apoya al derecho federal para el aborto y quiere impedir que los estados lo prohíban antes de la viabilidad fetal. En este sentido, también destaca que está a favor de firmar las leyes que aseguren el derecho al aborto a nivel federal. A su vez, Trump dijo que no firmaría la prohibición federal de abortos, ya que cada estado debe optar por las restricciones que planea implementar.
La deuda pública
La deuda pública de EE.UU. es ahora el 99 % del PIB del país y al nivel actual de ingresos y gastos presupuestarios crecerá del 102 % en 2026 al 125 % en 2035. Según las proyecciones de economistas, con Harris, la deuda aumentará una media de casi 4 billones de dólares en 10 años, hasta alcanzar el 133 % del PIB, mientras que con Trump, la deuda aumentará 7,75 billones de dólares hasta el 142 % del PIB.
De acuerdo con las últimas encuestas, si bien la brecha entre los dos candidatos es extremadamente pequeña, Harris lidera a nivel nacional. Así, según los datos recopilados por Patriot Polling, Harris lidera con el 49 %, mientras que Trump cuenta con el 48 %. Con respecto a algunos de los estados péndulo (o indecisos), Trump lidera en Arizona, Pensilvania (una diferencia del 0,2 %), Georgia, Nevada (el 47,9 % contra el 47,3 %), Carolina del Norte, mientras que Harris en Míchigan y Wisconsin (en ambos estados la diferencia es el 0,8 %). Al mismo tiempo, Harris lidera a nivel nacional. (Información RT).