–La Misión de Observación Electoral (MOE) presentó un informe sobre la violencia contra liderazgos políticos, sociales y comunales en Colombia durante los primeros nueve meses de 2024, según el cual, durante este periodo, se registraron 395 hechos violentos, destacándose las amenazas (205 casos), los asesinatos (108), los atentados (51) y los secuestros (27).
Según la MOE, estos datos consolidan al 2024 como el cuarto año con mayor número de agresiones contra liderazgos desde 2016, lo que evidencia un preocupante deterioro de las condiciones de seguridad para estos actores fundamentales en el tejido social y democrático del país.
Destaca que un aspecto alarmante del informe es el incremento de la violencia letal, que representó el 40,3% de los incidentes reportados. Además, el secuestro alcanzó cifras récord, con un aumento del 145,5% respecto a 2023, siendo el tipo de agresión con mayor crecimiento desde 2016. Este fenómeno afecta principalmente a los liderazgos políticos y sociales, con una mayor incidencia en las zonas rurales, donde se registró el 88,9% de los secuestros.
Cinco departamentos concentran el 52,9% de los hechos de violencia: Valle del Cauca, Antioquia, Norte de Santander, Santander y Cauca. En estas regiones, la violencia letal tiene una alta incidencia, con Valle del Cauca y Cauca como los territorios más afectados en áreas rurales.
Los liderazgos políticos fueron los más atacados, con un 46,1% de los casos, reflejando un aumento del 55,56% en comparación con 2020. Los liderazgos comunales también experimentaron un incremento significativo, con un 71,43% más de agresiones. Por otro lado, los liderazgos sociales, aunque siguen siendo gravemente impactados, mostraron una disminución general del 37,77%, lo cual plantea dinámicas diferenciadas en los tipos de agresión y la respuesta de los grupos armados ilegales en distintas regiones, sin que esta sea la única variable que determine los patrones de afectación.
Un análisis particular revela una afectación significativa contra las mujeres lideresas, quienes representan el 20,8% de los casos registrados. Aunque se observa una leve disminución en la violencia letal contra ellas en comparación con 2020, las lideresas comunales han experimentado un incremento del 133.3% en acciones letales. Esta situación refleja la necesidad urgente de fortalecer las estrategias de protección hacia las mujeres en roles de liderazgo.
En las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz (CITREP), los hechos de violencia se redujeron un 33,5% respecto a 2020, sin embargo, siguen siendo escenarios de alta vulnerabilidad, concentrando el 32,15% de los incidentes nacionales, con un énfasis en asesinatos y secuestros. Esto evidencia la persistencia de amenazas en territorios donde se buscan construir condiciones para la reconciliación y la paz.
Paralelamente, los hechos de violencia atribuidos a Grupos Armados Ilegales (GAI) aumentaron significativamente, con 1.875 incidentes registrados en 2024, un crecimiento del 60,9% respecto a 2023. El 75,8% de estas acciones ocurrieron en zonas rurales, afectando principalmente a Cauca, Antioquia y Valle del Cauca, departamentos donde la violencia ha alcanzado niveles sin precedentes.
Frente a este preocupante panorama, la MOE destaca la necesidad de implementar acciones integrales que aborden las causas estructurales de la violencia y garanticen la seguridad de los liderazgos sociales, políticos y comunales. Entre las medidas propuestas se incluyen.
Fortalecer la presencia estatal en zonas rurales, mejorando los esquemas de seguridad y promoviendo la justicia en regiones de difícil acceso.
Incrementar los programas de protección individual y colectiva para líderes sociales, políticos y comunales, con especial atención a lideresas.
Implementar estrategias de diálogo y construcción de paz en territorios donde los GAI tienen mayor incidencia, como el Cauca y Valle del Cauca.
Priorizar investigaciones y judicialización de los hechos de violencia, buscando garantizar verdad, justicia y reparación para las víctimas.
Este informe advierte sobre la gravedad del contexto actual y la urgente necesidad de actuar para garantizar la seguridad y la estabilidad de los liderazgos, esenciales para la democracia y el tejido social en Colombia.
Este informe de la MOE evidencia la gravedad del contexto actual para los liderazgos en Colombia, quienes son pilares esenciales de la democracia y el tejido social. La urgente necesidad de acciones integrales por parte del Estado, la sociedad civil y la comunidad internacional es innegable para mitigar esta violencia, proteger a los líderes y lideresas, y garantizar las condiciones necesarias para la estabilidad democrática y la reconciliación en el país.