Un sindicato colombiano anunció en las últimas que denunciará ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) el despido de 185 trabajadores agrarios, los cuales fueron además desalojados a tiros de la finca donde trabajaban, por haberse unido a esa organización.
Uno de los desalojados y despedidos, Miguel Augusto Cuenca, resultó herido por los desconocidos que se presentaron armados e la finca, según la denuncia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Agropecuaria (Sintrainagro).
Los hechos sucedieron el jueves en la finca Palo Alto, situada en Ciénaga, localidad en el departamento caribeño del Magdalena, informó el presidente interino de Sintrainagro, Hernán Correa.
La hacienda pertenece a la empresa Inversiones Palo Alto Gnecco Espinosa y desde el 23 de diciembre pasado los trabajadores habían empezado a protestar por el impago de salarios, primas, subsidios y aportaciones para salud y pensiones, entre otras obligaciones, agregó Correa.
El dirigente sindical subrayó que estos hechos son una “clara violación de los derechos laborales por parte de esta empresa”, que “atenta también contra los derechos humanos al tomar represalias contra los trabajadores por ejercer el libre derecho a la sindicalización”.
“Necesitamos que se tomen las acciones penales contra esta empresa”, dijo el sindicalista, y anunció que denunciará estos hechos ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y otras instancias internacionales de defensa de los derechos humanos.
Comments are closed.