Una flotilla de helicópteros que participa en la extinción de incendios forestales en las montañas y bosques que rodean la localidad de Villa de Leyva no han podido reiniciar sus labores debido a los vientos en la zona, revelaron fuentes oficiales.
Las conflagraciones han destruido algo más de 500 hectáreas y han afectado las orillas de los riachuelos La Palma, San Agustín, San Francisco, Los Tintales, Los Cerezos, La Colorada y los Curies, señaló un reporte oficial.
El Ministerio del Interior y de Justicia y la Dirección de Gestión del Riesgo señalaron este viernes en un comunicado que las llamas afectan los alrededores de esa población colonial y turística desde el pasado miércoles.
El fuego se inició en el cerro El Esterillal, localizado en la zona norte de ese municipio del departamento de Boyacá, situado a 177 kilómetros al noroccidente de Bogotá.
En la extinción de las llamas participan unas 450 personas entre bomberos, miembros de la Defensa Civil, del Ejército, la Policía, la Cruz Roja, la Fuerza Aérea y la comunidad, añadió el reporte.
Según información del comandante de Bomberos de Villa de Leyva, la altura de las llamas alcanza los 4 metros “y se propaga rápidamente por la velocidad del viento, lo que ha impedido que los helicópteros de la Fuerza Aérea continúen con sus labores de apoyo”.
La Dirección de Gestión del Riesgo entregó al Comité Regional y a los bomberos que participan en la lucha contra las llamas, material y equipo especializado para la atención de los incendios forestales como tres motobombas, rastrillos, palas, machetes, mangueras y uniformes completos.
Esos elementos, señaló el comunicado oficial, hacen parte de las ayudas donadas por Estados Unidos al Sistema Nacional para la Prevención y Atención de Desastres.
En las oficinas de la Alcaldía de Villa de Leyva fue levantado un “Puesto de Mando Unificado” para coordinar las tareas de extinción, mientras que algunos hoteles y casas de descanso en las faldas del cerro afectado fueron evacuadas.
Los incendios forestales afectan al país desde comienzos de este año debido a una intensa sequía, y han consumido cerca de 18.000 hectáreas en 23 de sus 32 departamentos.